4 puntos sobre la feminización de la voz
La feminización de la voz es un tratamiento que se empezó a realizar en España hace cinco años y cada vez es más conocida y tiene más demanda. El objetivo es, por supuesto, modificar la voz de una paciente para que sea más aguda y más femenina que su voz original.
En qué consiste la feminización de la voz
Para conseguir feminizar la voz, la paciente se somete a una cirugía mínimamente invasiva denominada glotoplastia de Wendler, realizada por el médico especialista en Otorrinolaringología, que consiste en acortar las cuerdas vocales para conseguir una voz más aguda y femenina.
Esta intervención se realiza bajo anestesia general por vía endoscópica, es decir, a través de la boca, con una pequeña incisión en la piel. Tras la operación, la paciente deberá seguir unas sesiones de logopedia impartidas por un profesional.
Complicaciones de la feminización de la voz
Todas las operaciones pueden tener complicaciones si se desconoce la técnica, pero, si el médico especialista tiene suficiente experiencia, la principal complicación puede ser que no se agudice la voz y se quede igual que antes de la intervención, que ocurre en entre el 1 y el 3% de las intervenciones.
Perfil del paciente en la feminización de la voz
Este tratamiento está dirigido a dos tipos de pacientes:
- Mujeres con voz masculina: esta condición se llama androfonía y suele tener un trastorno hormonal.
- Mujeres transgénero: asignadas como hombres al nacer pero con identidad de género de mujer.
Postoperatorio de la feminización de la voz
La glotoplastia de Wendler requiere un día de ingreso hospitalario y 15 días de reposo vocal absoluto. Pasadas estas dos semanas, la paciente deberá seguir unas sesiones de logopedia durante al menos tres meses para adquirir la nueva voz de forma efectiva.