Alopecia femenina
¿Qué características tiene la alopecia femenina y cuáles son sus principales tipos?
Hay muchos tipos de alopecia. Pueden ser debidas a falta de hierro, una anemia, una intervención quirúrgica, una alopecia post-parto, trastornos de tiroides, trastornos metabólicos y nutricionales y, la más frecuente, es la alopecia androgenética, que cada vez se ve más. Es de una severidad tremenda porque puede evolucionar a la calvicie.
¿Cuáles son las principales causas?
Antes ya hemos mencionado todos los tipos de alopecia. Cada una tenía su causa, y en el caso de la alopecia androgenética hay un factor hormonal y un factor genético que, los dos combinados, producen la alopecia. En el pelo tenemos unos receptores en los cuales se fija una substancia que va atrofiándolos y debilitándolos. En las personas que tienen una predisposición genética, esta substancia se fija en los receptores y produce la caída de pelo. Cuando no hay la predisposición genética, estos pelos no tienen los receptores y esta substancia no los perjudica.
¿Qué tratamiento es más efectivo para cada tipo de alopecia?
En principio en cada alopecia lo principal es tratar la causa. Es decir, en las que son por anemia solucionar la anemia, si hay un trastorno de tiroides, lo mismo, etc... En el caso de la alopecia androgenética tenemos mecanismos para bloquearla. Actualmente tenemos substancias como el Finasteride, el Minoxidil por vía tópica y otras vitaminas y aminoácidos e incluso a veces haciendo infiltraciones de vitaminas que pueden fortalecer en folículo piloso. En último extremo, y cuando ya no hay solución y se ha perdido el pelo, nos queda siempre la solución del implante.
¿La alopecia puede curarse definitivamente o sólo se retrasa?
Retrasarla siempre vamos a poder. Haciendo tratamiento siempre vamos a alargar la vida del pelo, puede ser que lo alarguemos más o menos según las circunstancias, y muchas otras veces se puede curar. Cuando obtenemos el diagnóstico correcto de la causa, solucionando la causa se puede solucionar la alopecia. En el caso más conflictivo que es la alopecia androgenética, no siempre se puede solucionar definitivamente y hay que mantener el tratamiento de por vida, pero se puede conseguir, a veces, incluso repoblación de pelo que se había perdido. Esto nunca lo podemos garantizar porque depende de los casos pero, cuanto menos, siempre podemos alargar muchos años el proceso y, en la mayoría de ellos, establecer una situación aceptable tanto psicológica como cosmética para la persona.