Alzheimer, una demencia difícil de combatir
La enfermedad del Alzheimer (EA) es uno de los trastornos más frecuentes de hoy en día, y “aproximadamente un 60% de las demencias se deben a su causa”, según indica el doctor Pablo Casariego, experto neurólogo de la Unidad de Ciencias Neurológicas de Madrid. La prevalencia de la enfermedad varía con la edad, siendo de “un 2% entre los 65-69 años y cerca del 60% en mayores de 90 años”.
“El 10% de las causas del Alzheimer son hereditarias, el 30% tienen antecedentes familiares con EA y el 60% restante se considera casos esporádicos”. Aunque se desconocen las causas exactas, su efecto sobre las neuronas es claro ya que, como explica el doctor Casariego, “se producen depósitos no solubles de proteínas beta-amiloide y proteína Tau que matan las neuronas”. Además, existen otros factores de riesgo como “la edad, historia familiar, sexo femenino, antecedente de TCE severo, dislipemia, inactividad física e intelectual, fumar, dieta pobre en vegetales y frutas, entre otros”.
Para el doctor, el tratamiento farmacológico actual de la EA “es poco gratificante”. Existen dos tipos de fármacos que mejoran “de forma discreta sus síntomas y por un tiempo muy limitado”: inhibidores de la acetilcolinesterasa y la memantina. El tratamiento no farmacológico, fundamental para el doctor Casariego, se realiza con rehabilitación cognitiva, ejercicio físico adecuado, alimentación correcta y adecuación de su entorno. “No hay que olvidar el tratamiento de las complicaciones (antidepresivos, antipsicóticos, etc.) cuando sea necesario”, añade el experto.
Se están desarrollando multitud de fármacos con nuevas dianas para intentar evitar el depósito de beta-amiloide o Tau, mejorando el metabolismo mitocondrial, vacunas para producir inmunización contra Beta-amiloide, actuando sobre los receptores nicotínicos, factores de crecimiento, Inhibidor de la γ-secretasa, etc.
Se espera que en pocos años el tratamiento para esta “devastadora enfermedad haya cambiado de forma muy importante”. “En nuestro centro -concluye el doctor- estamos investigando la molécula CL2-30893-012 que actúa a través de los receptores histamínicos frontales mejorando la memoria episódica”.