Avances en el tratamiento de piedras en la vesícula
¿Por qué aparecen piedras en la vesícula?
La bilis que produce el hígado se almacena en la vesícula. Esta bilis se expulsa en el momento de la digestión y ayuda a hacer la absorción de la misma. La bilis puede precipitar al fondo, los diferentes componentes, apareciendo las piedras y son estas piedras las que producirán estas complicaciones como la coleocistitis, la coledocolitiasis, la colangitis o incluso la inflamación del páncreas en la zona común del conducto biliar y el páncreas. Por eso el tratamiento es la extirpación de la vesícula porque es el único factor que podemos modificar para que vuelvan a aparecer las piedras.
¿En qué consiste la colecistectomía por minilaparoscopia?
Es la extirpación de la vesícula biliar. Hasta ahora, después de la cirugía abierta pasamos a hacerlo por cirugía laparoscópica. Introducíamos unas pinzas dentro del abdomen con unos instrumentos llamados trócales que tenían diferentes calibres, 5, 10, 12 milímetros, y necesitábamos 3, 4 puertos de acceso para manipular la vesícula. Hoy en día estas técnicas laparoscópicas han ido evolucionando, cada vez necesitamos incisiones más pequeñas porque disponemos de un material más fino, actualmente es de 2 o 3 milímetros, y sin la necesidad de trócales podemos realizar exactamente la misma intervención que hacíamos antes. La intervención en si consiste en la manipulación de la vesícula. Vamos a buscar el conducto que une la vesícula al conducto biliar y lo seccionamos para poder separar la vesícula del hígado. De esta manera conseguimos solucionar uno de los factores por los cuales aparecían las piedras que es el tiempo de almacenaje de una bilis propensa a la precipitación.
¿Para qué personas y en qué casos está indicado?
Debemos valorarlo caso a caso con su cirujano pero en principio todos los casos de pacientes con colelitiasis, que son las piedras en la vesícula, que tienen indicación de tratamiento quirúrgico, son casos que pueden ser valorados para ser tratados de manera completa o parcial con técnicas de minilaparoscopia.
¿Qué beneficios conlleva esta técnica?
Lo primero es que es una técnica segura, de hecho estamos reproduciendo la misma cirugía que hacíamos con las técnicas laparoscópicas convencionales por lo tanto no estamos añadiendo complejidad y esto hace que el procedimiento sea seguro. Lo hacemos en este caso con un material más fino que no requiere de estos trócales que utilizábamos anteriormente y por lo tanto las heridas son de un tamaño menor. Esto reduce el dolor durante el postoperatorio inmediato y además consigue una clara mejoría estética. La herida es tan pequeña, es como un pinchazo de hecho, que no requie-re ni de sutura con lo que con poco tiempo el resultado estético es muy bueno.