Cirugía para implantar prótesis de hombro
La prótesis de hombro es una técnica de sustitución de la articulación del hombro para el tratamiento tanto de fracturas del cuello del húmero como para el tratamiento de la artrosis, reumatismo articular o secuelas avanzadas e inoperables de lesiones del manguito de los rotadores.
El procedimiento requiere anestesia general. El traumatólogo realiza un abordaje en la cara anterior del hombro aunque en el implante de prótesis invertidas se puede abordar por la cara lateral. Se reseca la cabeza del húmero y se sustituye por una prótesis con un vástago que se fija en la cavidad medular del húmero bien con cemento o a presión con una cabeza de aleación metálica que se articula con la glena. Esta glena en casos de degeneración también se recubre con un implante de polietileno que se fija con cemento.
Tipos de prótesis en el mercado
Las más conocidas son la prótesis total de hombro para el tratamiento de la artrosis, que requiere una integridad de los músculos del manguito rotador; la prótesis anatómica o cervicocefálica, que sustituye la cabeza del húmero por una nueva cabeza metálica; y la prótesis invertida reversa, que en los últimos años se viene usando para varias indicaciones, desde el tratamiento de artrosis con degeneración del manguito rotador, el tratamiento de fracturas con múltiples fragmentos y osteoporosis y también en el tratamiento de secuelas de fracturas.
¿Qué requisitos debe tener el paciente para operarse?
El primero de todos es que tenga una fractura de cabeza y cuello de húmero que no se puede tratar con osteosíntesis, que tenga una artrosis o artritis reumatoide dolorosa e incapacitante, secuelas de fracturas mal consolidadas u otros. Otro requisito es no tener ningún tipo de infección a nivel del hombro o a distancia.
Es necesario gozar de unas condiciones de salud que permitan soportar una cirugía importante que en ocasiones puede requerir transfusiones. También es un requerimiento la capacidad mental suficiente para soportar un programa de rehabilitación después de la cirugía.
¿En qué consiste la recuperación por el implante de estas prótesis?
Después de la intervención lo habitual es pasar entre 24 y 48 horas en el hospital para control del sangrado y del dolor. El paciente es dado de alta con el hombro inmovilizado. Durante las tres o cuatro semanas posteriores se recomienda realizar movimientos asistidos y pendulares. A partir de la cuarta semana se retira el cabestrillo y se inicia la rehabilitación.
Resultados tras la operación
Generalmente tiene buenos resultados, aunque como cualquier procedimiento de artroplastia no está exento de complicaciones siendo las más relevantes la luxación, la infección y la rigidez.
En una evolución normal el dolor mejora de forma sensible. En cuanto a la movilidad, se recupera entre un 60% y un 90% de la función completa.