Cirugía para la Obesidad Mórbida
¿Soy candidato a la cirugía?
Usted es candidato a la cirugía por cumplir los requisitos internacionalmente admitidos que son tener un índice de masa corporal mayor de 40 o mayor de 35 asociado a las enfermedades que desarrolla la obesidad, tener una obesidad de largo tiempo de evolución y haber fracasado las medidas convencionales médicas debidamente supervisadas por un endocrino. Por otro lado, no tener contraindicación para la cirugía y está en un rango de edad en que se puede beneficiar mucho de este tratamiento.
¿Qué técnicas quirúrgicas existen?
No hay una técnica ideal ni tampoco una única técnica quirúrgica, aunque todas ellas las realizamos mediante cirugía laparoscópica o ayuda con soporte robótico. Existen 2 grandes grupos, las técnicas restrictivas como la tubulización gástrica que pretende que el paciente pierda peso gracias a reducir el tamaño del estómago. De esta forma el paciente comiendo menos y sin pasar hambre perderá peso. El segundo grupo es el de las técnicas mixtas como el bypass gástrico, éstas asocian al efecto restrictivo un efecto malabsortivo al reducir la longitud del intestino donde llegan los alimentos. De esta forma conseguiremos que el paciente pierda más peso que en las únicamente restrictivas.
¿En qué casos está indicada cada cirugía?
Utilizaremos una técnica restrictiva o mixta en función del grado de obesidad del paciente, su patología asociada y el hábito alimentario que tenga. A grandes rasgos en pacientes con poco exceso de peso y que no sean golosos ni les guste picar entre horas podremos optar por técni-cas restrictivas y en pacientes más obesos o con hábitos alimentarios diferentes deberíamos optar por técnicas mixtas más complejas.
¿Qué resultados se pueden esperar?
Tras seleccionar de forma adecuada la técnica a cada paciente conseguiremos una pérdida de peso de entre un 50% y un 60% del exceso de peso en pacientes con técnicas restrictivas y entre un 70% y un 80% con las técnicas mixtas. Estos resultados pueden mejorarse si el paciente cambia de forma adecuada sus malos hábitos alimentarios pre-operatorios y si el paciente rea-liza actividad física de forma rutinaria tras la cirugía.