¿Cómo se puede tratar la hiperhidrosis?
La hiperhidrosis es la sudoración excesiva que se produce en algunas personas. Existen diferentes técnicas para tratarla. Según los expertos en Cirugía Torácica, al no existir una causa definida, el tratamiento es sintomático, ya que lo que pretende es eliminar el exceso de sudoración. Ciertas medidas higiénicas como por ejemplos los polvos absorbentes, usar ropa de algodón, zapatos de piel o evitar el caucho, ayudan a reducir la sudoración.
Agentes tópicos
El uso de agentes tópicos sobre la zona afecta suele utilizarse como tratamiento inicial y es efectivo en un 25%-60% de los casos. Los más frecuentes son la solución de Hexacloruro de Aluminio al 2%, que bloquea los conductos sudoríparos. Se prefiere usarlo de noche y se puede utilizar otro medicamento (un anticolinérgico) para prevenir la sudoración una vez que se retira la solución con cloruro de aluminio.
Iontoforesis
Si el paciente no responde al tratamiento tópico, una opción es la iontoforesis. Esta técnica consiste en introducir sales iónicas en agua. La zona afectada se introduce en el agua durante 10 o 20 minutos diariamente durante una semana. Después se repite una vez por semana o al mes. Aunque los tratamientos pueden ser efectivos, su práctica lleva mucho tiempo y crea una gran dependencia al paciente, lo que hace que algunos pacientes se cansen de esta rutina.
Toxina Botulínica de tipo A
La Toxina Botulínica de tipo A es una neurotoxina que se administra de forma intradérmica por inyección directa en las zonas de la axila, palmas de la mano o frente. Se administra una por cada cm2. Inhibe la sudoración durante aproximadamente 5 meses, dependiendo de la dosis. Este tratamiento tiene mayor eficacia cuando se aplica en la zona de la axila.
Presenta algunas complicaciones que pueden ser la debilidad muscular local y las cefaleas. Las inyecciones resultan eficaces aunque son dolorosas y caras.
Técnicas de Psicoterapia
Las técnicas de psicoterapia son de efecto limitado y prolongadas en el tiempo que requieren dedicación y constancia excesivas con unos resultados, hasta el momento, inciertos.
Tratamiento quirúrgico
El tratamiento quirúrgico en los casos de hiperhidrosis está indicado para pacientes que ya han realizado anteriormente algún otro tratamiento sin éxito.
Los pacientes con sudoración axilar pueden ser tratados con resección quirúrgica de las glándulas sudoríparas de esa zona mediante disección abierta o por liposucción.
Los pacientes con sudoración palmar, axilar, craneal y rubor facial pueden ser tratados con simpatectomía por videotoracoscopia bilateral. Se trata de una operación poco dolorosa y con frecuencia a las 48 horas el paciente ya no se necesita analgésicos. La recuperación es muy rápida y la persona puede volver a su trabajo en 48-72 horas. Los resultados son muy satisfactorios, generalmente más del 92%, especialmente en la palmar, algo menos en la axilar y más dudosos en el rubor.
El índice de calidad de vida registra niveles muy elevados con un descenso considerable del nivel de ansiedad.
La videotoracoscopia es el tratamiento de referencia en la hiperhidrosis primaria debido a los resultados, la calidad de vida y el grado de satisfacción.