Cómo tratar la epicondilitis, el codo de tenista
La epicondilitis, o codo de tenis, es una inflamación crónica en uno de los tendones que extienden la muñeca (extensor carpi radialis brevis). Aunque se le ha dado este nombre porque afecta a muchos tenistas, la mayor parte de los pacientes no lo son.
Síntomas de la epicondilitis o codo de tenista
La exploración médica es clara, pero la prueba para confirmar si un codo tiene una epicondilitis es sacando un portátil de una mochila, con la palma de la mano hacia abajo. Si realizando esta acción se siente un dolor intenso será necesario recurrir a una visita con un especialista en Traumatología para que evalúe el alcance de la patología.
Tratamiento para la epicondilitis o codo de tenista
El tratamiento inicial siempre debe de ser conservador. En función del estado de la epicondilitis se encuentran múltiples opciones de tratamiento:
- Reducir las actividades causantes: Especialmente en el caso de deportes de raqueta. En ocasiones es suficiente aumentar el grosor del grip con una cinta u overgrip. Cuando el dolor se relaciona con deportes de raqueta, es útil usar una cincha epicondílea en el codo. Ésta se puede obtener en cualquier ortopedia.
- Disminuir la inflamación: Si bien en casos más agudos son útiles los anti-inflamatorios, en casos crónicos es recomendable aplicar hielo. Se puede combinar con anti-inflamatorios en crema, que no dañarán el estómago aunque se utilicen de forma prolongada.
- Fisioterapia: Existen múltiples técnicas de fisioterapia para el tratamiento de la epicondilitis. La más eficaz es la que se baja en ejercicios excéntricos. Pero este tratamiento debe de ser dirigido y monitorizado por un especialista en Fisioterapia.
- Infiltraciones de esteroides: Se deben de reservar para casos muy agudos, porque el alivio suele ser muy transitorio, y si se repiten en exceso, causan daños permanentes en los tejidos.
- Infiltraciones de plasma rico en plaquetas: Se ha puesto muy de moda a raíz de diferentes tratamientos realizados a deportistas reconocidos. Las infiltraciones de plasma rico en plaquetas consisten en concentrar factores de crecimiento que tenemos en unas células sanguíneas (las plaquetas). Su aplicación en la zona degenerada del tendón acelera la cicatrización del mismo siendo más eficaces a medio plazo que los esteroides… pero mucho más caras.
- Artroscopia de codo: Se puede hacer mediante cirugía abierta o artroscópica. La técnica artroscópica es la que más recomendable, dado que permite limpiar el tejido degenerado (desbridamiento), a la vez que permite descartar la presencia de otras lesiones articulares. Sin embargo, se debe de realizar tras el fracaso de otros tratamientos menos agresivos.