¿Conoces las fases del Parkinson?
La enfermedad de Parkinson es una enfermedad degenerativa de causa desconocida, que sufren en España alrededor de 80.000 personas. En los casos que comienzan por debajo de los 45 años los factores genéticos son importantes. Por el contrario, en los casos habituales (por encima de los 45 años), dichos factores juegan un escaso papel.
Sabemos –aunque no muy bien porqué- que el Parkinson es menos frecuente en fumadores, y probablemente el café reduzca el riesgo de padecerlo.
Fases del Parkinson
Fase premotora del Parkinson
El Parkinson empieza mucho antes de su diagnóstico, en lo que se conoce como fase premotora. Aquí aparecen los primeros síntomas: estreñimiento y alteraciones del olfato con pérdida de agudeza de dicho sentido. Estos síntomas preceden en años a la aparición de los síntomas motores típicos de la enfermedad.
Una alteración muy característica de la fase premotora es el llamado trastorno del sueño de la fase REM, que consiste en que mientras se duerme, el sujeto se mueve mucho, habla o incluso grita. Esto se debe a que están estropeadas las conexiones que deberían impedir que los “sueños” no tengan una manifestación motora. Este trastorno se diagnóstica con la realización de estudios del sueño (polimnografía).
Fase motora del Parkinson
El diagnóstico del Parkinson se realiza cuando comienzan las manifestaciones motoras, en la conocida como fase motora. La torpeza motora, “acinesia” en lenguaje médico, siempre está presente y es el síntoma más incapacitante. Sus manifestaciones en la vida cotidiana son el cambio en el tamaño de la letra, la dificultad para escribir, abrocharse los cordones de los zapatos, la ausencia de braceo el andar etc. El temblor conocido como de “de reposo” en lenguaje médico, es otro de los síntomas característicos la enfermedad. Dicho temblor es bastante frecuente, sin embargo, aproximadamente un tercio de los pacientes no llegan nunca a desarrollarlo. Además de estos síntomas, el médico durante la exploración observa un tipo de rigidez característica denominada “en rueda dentada”.
Según los especialistas en Neurología, cuando la enfermedad avanza, surgen alteraciones de la marcha y en algunos casos pérdida de memoria.
Tratamiento del Parkinson
Una vez se diagnostica la enfermedad disponemos de algunos medicamentos que pueden enlentecer su progresión. El tratamiento “sintomático” es bueno, eficaz y permite que durante los primeros años el paciente lleve una vida normal con el único inconveniente de la ingesta diaria de la medicación. Cuando la enfermedad progresa, existen tres tipos de tratamientos para mejorar la calidad de vida del paciente y mitigar los síntomas. Dichos tratamientos son: La colocación de unos electrodos en el cerebro, la inyección continua de una sustancia llamada apomorfina, o la administración a través del estómago de otra sustancia llamada duodopa.
Por último, comentar que la investigación sobre la causa de la enfermedad y los nuevos tratamientos es muy activa, tanto en España como en el extranjero, por lo que debemos de esperar el futuro con esperanza e ilusión.