Cuándo ser madre: Un embarazo con garantías y seguridad
El primer dato que hay que saber es que el potencial reproductivo de la mujer sana disminuye fisiológicamente con la edad, especialmente a partir de los 35-37 años. Si con 25 años la fertilidad puede ser del 80%, con 30 es del 70% y con 35 es del 60%, con 37 baja al 50% y con 42 llega al 36%.
Si no tienes pensado, no puedes o no quieres ser madre antes de los 35, deberías conocer en qué consiste la preservación de la fertilidad y valorarla como una opción viable para ser madre cuando decidas. Si no lo tienes en cuenta es posible que tu cuerpo no responda como esperas.
La preservación de la fertilidad consiste en la congelación de los óvulos por vitrificación. Esta técnica permite obtener unas tasas de supervivencia más elevadas en el proceso de congelación y descongelación consiguiendo que el 85-98% de los óvulos vitrificados superen con éxito el proceso. Además permite evitar lesiones en el óvulo gracias al rápido enfriamiento y a los crioprotectores utilizados.
Nuevas oportunidades
La técnica de vitrificación también se utiliza en personas que han pasado por un tratamiento oncológico. Gracias a los altos índices de superación de muchos cánceres, se ha planteado la necesidad de recuperar el deseo reproductivo de estas personas después de la posible pérdida de la fertilidad durante los tratamientos de quimio y/o radioterapia. Así, ya sea mediante la criopreservación de ovocitos o de espermatozoides antes de los tratamientos oncológicos, se podrá mantener la fertilidad inicial ofreciendo una mejor calidad de vida.