DermaVital, el nuevo tratamiento para las imperfecciones cutáneas
El Dr. Moisés Amselem, experto en Estética, está siempre a la vanguardia de las últimas investigaciones de la medicina estética y la dermatología. El último tratamiento que ha incluido es DermaVital, que permite abordar problemas específicos del rostro según el ciclo de vida de la piel. El doctor nos habla de este tratamiento innovador y de su procedimiento.
Qué imperfecciones cutáneas permite tratar DermaVital
Este tratamiento de choque forma parte de una nueva visión del mundo de la medicina estética, permitiendo el abordaje de problemas específicos que aparecen en el rostro debido a los ciclos de vida. Este tratamiento permite combatir el acné, las arrugas finas, la pérdida de firmeza, las manchas y otras imperfecciones.
Con este tratamiento se optimiza la renovación celular, combatiendo la capacidad de resistencia y reparación de la piel. Es una combinación en la que interviene la renovación celular, el bioreciclaje para regenerar las proteínas dañadas y la restructuración completa de la textura de la piel.
Dermavital para tratar el acné
El tratamiento del acné mediante DermaVital consta de 4 fases:
- Fase 1: el tratamiento se empieza con un preepiling, a base de una limpieza facial profunda que prepara la piel para hacer más fácil la penetración de todos los activos. En esta limpieza se extraen las células muertas mediante el masaje de zonas que presentan acné, con un exfoliante de ácido mandélico.
- Fase 2: en esta fase se hace un detox, aplicando un serum intenso y regenerante a base de oligopéptidos y ácido hialurónico que reactiva el ciclo de transformación de las toxinas de la piel. Gracias a esta fase se acelerará la desintoxicación del rostro.
- Fase 3: la restauración permite estabilizar el acné gracias a un serum con fithormonas. Los principios activos del serum son fosfato, ascorbil, magnesio y genisteína, que ayudan a la recuperación metabólica para lograr el equilibrio de la piel.
- Fase 4: con tal de activar y potenciar el efecto del tratamiento, se somete al paciente a una fotoestimulación a base de una terapia lumínica con una LED roja.
Para su efectividad se requieren cuatro sesiones, con un intervalo de 20 días entre cada una de ellas. Los resultados que se consiguen son inmediatos y se mantienen a largo plazo.