El azafrán como terapia natural favorecedora de la función sexual
Desde el principio de los tiempos, la búsqueda de la mejora en la potencia sexual es inherente a la humanidad. Conseguir una mejor fertilidad viene determinado por la lucha de la supervivencia de nuestra especie. Son muchos los afrodisíacos naturales que a lo largo del tiempo se han utilizado con el fin de potenciar la sexualidad, teniendo alguno de ellos más o menos efectos adversos.
En la medicina popular, siempre se ha dicho que el azafrán posee efectos afrodisíacos, y ha sido a partir de la realización de análisis científicos cuando se ha descubierto que el azafrán contiene una molécula llamada crocin, que es la responsable de la mejora de la función sexual en el varón. Así, a través de investigaciones se ha demostrado el efecto del azafrán como estimulante de la función sexual mejorando la erección.
Y es que, la ingesta de quince miligramos de azafrán encapsulado, dos veces al día, por un grupo de varones con disfunción eréctil, debida a la toma de antidepresivos, dio unos resultados positivos que se compararon con los obtenidos en otro grupo de varones con las mismas características que solo recibieron placebo durante dicha investigación, sin que ninguno de ellos conociese de antemano el componente que estaba ingiriendo, es decir, sin saber si tomaban placebo o azafrán.
El azafrán contra la disfunción eréctil
Así, el grupo de varones que recibieron azafrán (30 miligramos al día, repartidos en dos tomas) mejoró significativamente su función eréctil en más de la mitad de los casos y sin presentar efectos adversos. Estos resultados se comprobaron a las dos y a las cuatro semanas de la suplementación del azafrán, observándose que los resultados eran mayores a las cuatro semanas, si bien a las dos ya se percibió una mejoría en la erección de los varones que injerían la dosis diaria. Ello significa que el efecto del azafrán es dosis-dependiente y con un efecto acumulativo en el organismo en cuanto a la eficacia de los resultados obtenidos.
Además, el azafrán también presenta efectos positivos en el sistema nervioso central tanto en la depresión como en la demencia, siendo muy bien tolerado. Aunque el mecanismo de acción todavía no es bien conocido en el campo de la sexualidad, se sabe que aumenta los niveles de serotonina cerebral, neurotransmisor vinculado a la sensación de bienestar. Así, el azafrán es un suplemento muy a tener en cuenta en la clínica diaria tanto en la disfunción eréctil como en casos de tristeza, malestar psíquico o de depresión menor.