El papel del calcio en la osteoporosis
La osteoporosis no implica una falta de calcio en sí, sino que se produce por una pérdida del mismo; por este motivo, el tratamiento no debe basarse en aumentar su consumo sino en limitar su pérdida.
Asimismo, desde el punto de vista dietético, insistimos en evitar la acidificación del organismo (producida por carnes, dulces, azúcar en general, refrescos azucarados…) y en el ejercicio físico, así como en mantener unos niveles adecuados y suficientes de vitamina D.
No podemos hablar de osteoporosis sin mencionar el resultado del estudio que Colin Campbell, profesor emérito de Bioquímica Nutritiva de la Universidad Cornell, reflejó en su libro El estudio de China. El estudio, basado en 6.5000 individuos, concluyó que la leche animal desmineraliza a los adultos.
Durante la investigación, las mujeres que no tomaban leche de vaca (siendo su único alimento arroz, vegetales, soja y sus derivados) no tenían osteoporosis; sin embargo, si dejaban esa dieta e introducían leche de vaca, bajaban los niveles de calcio y empezaban a padecer dicha patología.
Cómo prevenir la osteoporosis a través de nuestra dieta
- Aumentar fuentes alternativas de calcio, como sésamos, col rizada, brócoli, sardinas, espinacas o yema de huevo.
- Disminuir la ingesta de fosfatos (lácteos, carne y refrescos con cola), grasas, ácido oxálico y ácido fítico (cereales y leguminosas).
Años después de la menopausia, y dependiendo de la estructura ósea de la mujer en la adolescencia, la masa ósea tiende a disminuir anualmente, puesto que la capacidad del cuerpo para producir tejido óseo comienza a disminuir.
Hay que tener en cuenta que la dieta moderna produce ácidos con los productos lácteos, carne y trigo, y el riñón no puede superar el exceso de ácido generado, por lo que se acumula en la sangre y el tejido conjuntivo. Por este motivo la dieta a llevar a cabo es sumamente importante.
Se recomienda desacidificar de la siguiente manera:
- Aumentar los alimentos ricos en minerales: verduras, castañas, almendras, aguacate. Cubrir los aportes de calcio, sin forzar los productos lácteos (brócoli, salmón, almendras, sardinas, etc.) y vitamina D (salmón, arenque, lenguado, ostras, cáscara de huevo).
- Reducir el consumo de café, alcohol, refrescos y tabaco.
Falacias asociadas a la osteoporosis:
- Las mujeres menopaúsicas tienen más probabilidad de desarrollar osteoporosis. Hay muchas culturas en las que la mujer postmenopáusica goza de buena salud, es activa y saludable y no sufre osteoporosis. Por tanto, si esto fuera verdad se advertiría a lo largo del mundo en todas las mujeres con fracturas.
- Para mantener los huesos fuertes necesitamos adquirir calcio de la dieta, especialmente en los lácteos.
Granadas, terapia de reemplazo hormonal natural en la menopausia
La granada, símbolo de fertilidad en culturas antiguas, tiene un parecido sorprendente con el ovario femenino que va más allá de sus similitudes físicas. Esta fruta también proporciona los mismos estrógenos que el ovario femenino (estradiol, estrona y estriol), por tanto, para una mujer menopáusica puede significar el alivio de estados de ánimo depresivos, menor riesgo de osteoporosis, cáncer de mama y enfermedades de corazón.
Suplementación alimenticia en la menopausia
- Vitamina K2; desplaza el calcio hacia las estructuras óseas y lejos de las paredes de los vasos sanguíneos arteriales. Actúa como cofactor en la activación de la osteocalcina: la vitamina k carboxila los residuos del ácido glutámico en la osteocalcina a Gla (ácido gamma-carboxiglutámico). La osteocalcina activada se une al calcio y ayuda a la incorporación del calcio en el componente hidroxiapatita de la matriz ósea. (NutriMk7; cienporciennatural).
- Zinc; mineral importante para el mantenimiento de los huesos, pues interviene en el equilibrio ácido-base de la sangre y participa en el metabolismo del fósforo y del calcio.
- Vitamina D: ayuda a la absorción y utilización normal del calcio y al mantenimiento de los huesos y los dientes sanos y fuertes.
- Manganeso: sirve para fijar el calcio.