Escleroterapia para el tratamiento de las varices
La esclerosis con espuma es una técnica de eliminación de varices que consiste en la introducción de un producto esclerosante, habitualmente el polidocanol micronizado, mezclado con un gas que puede ser el CO2 o aire ambiente, produciendo una reacción química que genera espuma. Esta espuma se introduce en una variz para ocluirla, es decir, hacer que se seque.
¿Cómo funciona esta técnica?
La introducción de la espuma produce un vasoespasmo que desplaza la sangre y permite tratar selectivamente la pared interna de la vena varicosa, transformándola en pocos meses en un cordón cicatricial por el que no circula la sangre.
En un principio se utilizó para el tratamiento de varices pequeñas y arañas vasculares, así como en tratamientos estéticos y en varices residuales tras la cirugía. En la actualidad y debido a la utilización del eco-döppler, esta técnica puede utilizarse en todo tipo de varices, tratamiento de úlceras venosas y angiodisplasias y enfermedades vasculares congénitas.
Ventajas y desventajas de esta técnica
La ventaja principal de este tratamiento es que es una técnica ambulatoria. Además es importante destacar que se puede realizar en la misma consulta médica y que no precisa anestesia.
Entre sus posibles desventajas se citan la posibilidad de varicoflebitis, la pigmentación de la piel y, si se tratan grandes varices, las recidivas.
¿Cómo es el postoperatorio?
Tras el tratamiento, el paciente puede hacer una vida completamente normal desde el primer momento; deporte incluido (bicicleta, gimnasio o running, por ejemplo) utilizando una media compresiva durante unos días. No es necesaria la baja laboral.
En varices pequeñas los resultados son duraderos. Sin embargo, en varices tronculares pueden producirse fallos precoces, oclusiones fallidas. A largo plazo, además, se puede dar la recanalización de las varices, es decir, una nueva aparición.
Riesgos de la intervención
Esta técnica no debe utilizarse en pacientes con una isquemia crónica de extremidades inferiores, ya sea moderada o incluso más importante. Una posible complicación de esta técnica es la reacción al esclerosante, que puede presentarse en uno de cada 3.000 casos tratados.