Factores de crecimiento: qué son, cómo se aplican y para qué se utilizan
¿Qué son los factores de crecimiento?
Los factores de crecimiento son unas proteínas que están dentro de las células a nivel del citoplasma y que, se ha descubierto, tienen una importante actividad de estímulo sobre la regeneración de los tejidos orgánicos. A partir de este descubrimiento se ha intentado conseguirlos para aplicarlos en medicina. Hoy en día es una técnica totalmente superada en cuanto a su obtención y en la aplicación en diversos campos de la medicina ha demostrado ser de gran utilidad.
¿Para qué se indican los factores de crecimiento en el campo de la reumatología?
Las indicaciones más importantes en el campo reumatológico son todos los procesos degenerativos, es decir, cuando a nivel de tendones o de cartílagos articulares empieza a haber un desgaste. Sabemos que no podemos influir en este proceso salvo con la aplicación de esta nueva técnica. Todo esto pretende evitar, en muchos casos, llegar a la cirugía sustitutiva.
Así, las indicaciones principales serían condromalacias, condropatías, tendinitis crónicas ya sea de hombros o de otras localizaciones.
¿Cómo se aplican y qué efectos secundarios tienen?
La aplicación de los factores de crecimiento se realiza directamente en la zona afectada pero la técnica para conseguirlos es a partir de las plaquetas, ya que son las células más ricas en factores de crecimiento. A partir de este conocimiento, se hace una extracción de sangre, la cual se centrifuga y de la que se obtiene el plasma que lleva la concentración de plaquetas que a su vez llevan los factores de crecimiento en su citoplasma. Sin embargo no están activados, así que antes de la aplicación deben ser activados mediante la aplicación de cloruro cálcico que produce la puesta en marcha de los factores de creimiento. Una vez preparados se aplican en la zona indicada ya sea intraarticular, o a nivel tendinoso dependiendo de la zona que se vaya a tratar.
En cuanto a efectos secundarios, no existen ya que los factores son homólogos, del propio paciente, así que no existe el problema de rechazo, de aquí la gran ventaja y la facilidad de aplicación de esta nueva técnica.
¿Cuáles son los resultados obtenidos hasta ahora?
Nuestra estadística personal se remonta a los últimos cuatro años durante los cuales hemos podido controlar a un número importante de pacientes y hemos observado hasta el momento que los resultados en cuanto a mejorar la resistencia del cartílago, disminuir la inflamación, disminuir el dolor y parar el avance de todo este proceso, está alrededor del 80%.
No disponemos de grupos comparativos hasta el momento pero basándonos en las experiencias personales tenemos que decir que los resultados son francamente alentadores.