Glándulas suprarrenales
Las suprarrenales (también conocidas como adrenales) son dos glándulas endocrinas (derecha e izquierda) situadas en la profundidad del abdomen, protegidas por la columna vertebral, las costillas, el riñón y las vísceras abdominales.
Su función primordial es la de secretar una amplia variedad de hormonas, unas hormonas necesarias para regular la temperatura corporal, la tensión arterial, el carácter, el sueño-vigilia, el apetito, las emociones e incluso el sexo. La importancia de estas glándulas reside en que pequeñas alteraciones hormonales a menudo producen graves trastornos y enfermedades. Un déficit o un exceso hormonal, condiciona mucho la salud y la calidad de vida de los pacientes.
Enfermedades de las glándulas suprarrenales
La suprarrenal puede enfermar. Hay un tipo de patología que no produce alteración hormonal detectable y por tanto puede ser difícil de diagnosticar, estos serían tumores no productores (adenoma, mielolipoma…). Habitualmente esta enfermedad no da ningún síntoma reconocible o específico, aunque los pacientes pueden presentar dolor y disconfort abdominal o síntomas por compresión de otra víscera. Suelen diagnosticarse de manera incidental (se encuentran ocasionalmente al buscar otra enfermedad).
Otro tipo de patología es la que produce alteración hormonal (defecto o exceso), como adenoma, feocromocitoma, sd de Cushing, etc. El diagnóstico se produce a través del exámen de los síntomas reconocibles por este exceso o defecto de la hormona concreta.
Aunque alguna de estas disfunciones tiene tratamiento médico, en ciertas ocasiones es necesario operar para extirpar la suprarrenal. Este es el caso de algunos tumores benignos no funcionantes de más de 4 cm, todos los tumores benignos funcionantes (Sd. Conn, feocromocitoma) y el carcinoma de suprarrenal.
Son frecuentes también las metástasis de otros tumores que asientan en la glándula descubiertos durante el seguimiento de la enfermedad neoplásica.
El cáncer de suprarrenal es poco frecuente pero muy agresivo. Hay diversos tipos de presentación, pero el más frecuente es el carcinoma hipersecretor. Se suele asentar sobre masas de más de 6 cm y la secreción hormonal es mixta. Ante su sospecha debe operarse de manera precoz, si se puede garantizar la exeresis completa de la tumoración.
Abordaje laparoscópico miniinvasivo transperitoneal (anterior) y retroperitoneal (posterior)
La intervención para extirpar las glándulas suprarrenales se puede realizar mediante dos vías de abordaje: Transperitoneal o Retroperitoneal. Nosotros podemos ofrecer cualquiera de las dos vías si el paciente lo necesita.
Laparoscopia transperitoneal (a través del abdomen): nosotros realizamos la intervención mediante técnicas mininvasivas, tanto laparoscopia estándar, miniinstrumentos como cirugía de puerto único (SILS) para un resultado estético impecable, para realizar estos abordajes nos ayudamos de dispositivos de sellado eficientes (ligasure) y de soporte endoscópico de última generación.
En nuestro medio encontramos una serie de pacientes en los que la realización de una laparoscopia estándar puede ser dificultosa, problemática o, incluso, contraindicada por sus características (obesidad), por sus antecedentes (operaciones abdominales, estomas, cáncer visceral abdominal, cirrosis hepática…), en estos casos el abordaje transperitoneal (anterior) puede poner en riesgo la integridad de las vísceras abdominales. Nosotros somos capaces de realizar la intervención desde “atrás”.
Laparoscopia retroperitoneal (vía posterior): realizamos la intervención mediante técnicas mininvasivas, tanto laparoscopia estándar como cirugía de puerto único (SILS), desde el espacio retroperitoneal, evitando el contacto y la manipulación de las vísceras abdominales. A pesar de ser una técnica más compleja que requiere mayor capacitación técnica, ofrece evidentes ventajas para la mayoría de los pacientes, tales como menor estancia hospitalaria, menor dolor postoperatorio y menor riesgo de complicaciones abdominales.