Guía para los padres de niños con TDAH
¿Cómo se pueden detectar señales de TDAH en los niños?
Los síntomas del TDAH pueden variar según la edad y es importante que los padres estén alerta al respecto. Los síntomas nucleares (inatención, hiperactividad e impulsividad) pueden aparecer a cualquier edad, pero en cada etapa vital predomina uno sobre los demás.
En la edad preescolar (Educación Infantil), predomina la hiperactividad combinada con impulsividad:
- Nerviosismo
- Movimientos constantes
- Inquietud persistente
Esta actitud suele ocasionar problemas de disciplina, como obedecer órdenes de padres y maestros, dificultad para relacionarse con los niños de su edad y problemas de aprendizaje, como en la lectura.
En la edad escolar (Educación Primaria), la falta de atención acostumbra a ser el síntoma primordial. Esta conducta conlleva problemas de rendimiento académico, con la lectura, la escritura, etcétera. En ocasiones sólo se presenta con déficit de atención, hiperactividad o impulsividad.
En la edad adolescente (Educación Secundaria), los problemas más serios son los de impulsividad. Cualquier chico en esta edad es complicado, pero si le sumamos dificultades en el ámbito escolar, en las relaciones sociales, en el comportamiento… La adolescencia es una edad muy complicada en estos chicos.
¿Existen grupos de ayuda o centros donde pueden acudir?
Por desgracia son pocos estos centros y en general se agrupan en las asociaciones de pacientes. Las familias están teniendo que agruparse para buscar apoyo. El centro INANP cuenta con especialistas en Neuropsicología y Psicopedagogía con gran experiencia en este tema para ayudar a padres y chicos.
¿Qué deben hacer los familiares de niños con TDAH una vez diagnosticado?
La mejor actitud a tomar una vez que un hijo ha sido diagnosticado de TDAH es formarse e informarse al máximo. En algunos centros, los profesionales en Pediatría colaboran con asociaciones de pacientes para formar a padres en estas necesidades y además desarrollan cursos grupales. Dentro de estos, se incluyen talleres personalizados en función de las necesidades de cada familia. La información es poder y el poder debe estar en las familias para que consigan cuidar adecuadamente de la salud y el desarrollo de sus hijos con TDAH.
¿Cómo deberían actuar frente al trastorno?
Ante todo hay que aceptarlo y asumirlo con normalidad. No es ningún drama vital padecer TDAH. Evidentemente supone dificultades y complicaciones en el día a día que requieren una ayuda, apoyo o tratamiento para ser solventados. A pesar de ello, el TDAH puede gestionarse adecuadamente si se detecta de forma precoz. Además, no todo es malo en el TDAH. Hay muchos detalles positivos y cualidades especialmente desarrolladas (creatividad, amistad, ilusión, habilidades deportivas…) que es conveniente recordar y explotar.
Cuando diagnostican a su hijo con TDAH, ¿los padres deben comunicarlo en la escuela rápidamente?
Este es un tema controvertido que depende más de las características concretas de cada centro y sus profesionales, que del chico en sí. Si la disposición prevista del centro es buena, perfecto, pero si no, la consecuencia puede ser contraproducente. Sea como sea, los padres deben hacer valer los derechos educativos de sus hijos.