Hábitos dietéticos recomendables antes del verano
Con la llegada del calor y del verano muchas personas han decidido retomar la dieta o cuidar sus hábitos dietéticos y alimenticios. Es momento ahora de poner en práctica algunos consejos y reajustes, que pueden ser claves para reorientar de forma realista y estable los hábitos dietéticos.
Los expertos recomiendan:
- Incluir en la comida y la cena, de forma diaria, un plato de hortalizas y verduras: Puede ser como ensalada o verdura cocinada, como primer plato o único, en alguna ocasión. Se recomienda mantener esta elección en comidas sociales. Aunque añada algún otro alimento más calórico o no tan saludable, ya habrá saciado parte importante del hambre con una buena elección basada en vegetales.
- Atención con las calorías bebidas: Ahora que se aproxima el verano, la excusa para desobedecer la dieta es “calmar la sed”. Con este argumento se beben refrescos, zumos, bebidas con alcohol o gazpacho, entre otros muchos.Cierto es que alguno puede aportar nutrientes, pero también lo es que suman muchas calorías de las que no somos conscientes. La única manera de calmar la sed es el agua. Algunas recomendaciones: comer fruta entera antes que zumos; el gazpacho,mejor en cuenco y con cuchara; diluir la cerveza o el vino con gaseosa, para aumentar y alargar la cantidad, sin añadir alcohol ni calorías. Por supuesto, olvidar el yogur bebido, los batidos de helado y cualquier formato que evite masticar.
- Quitar los extras del menú:Mirarlos alimentos extra que toma y que han terminado quedándose como habituales: cerveza en el aperitivo, helado, una copa, comida basura en más ocasiones de las debidas… No significa renunciar a ellos si supone un gran esfuerzo, pero se deben reservar para comidas sociales o especiales, respetando la semana laboral libre de excesos.
- Evitar los productos elaborados: Evitar la ingesta de comida precocinada, embutidos, quesos, bollería industrial… Simplificar.
- Consumir “grano”: Es recomendable suplir todos los alimentos que contengan harina refinada por granos enteros del cereal. No creerse al pie de la letra la etiqueta, aunque indique “integral”, ya que con esa denominación se pueden encontrar panes y productos con únicamente 10% de harina integral. Se recomienda la ingesta de legumbres, arroz integral o, como mucho, vaporizado, maíz entero, trigo… o bien los preparados que indiquen que la masa está elaborada con granos enteros.
Es importante destacar que estos consejos son válidos para todas las personas, pero cada paciente es único, de manera que el experto en Nutrición y Dietética será quien mejor aconseje para conseguir los avances deseados en su línea y hábitos dietéticos sin que peligre su salud.