He tenido un bebé, ¿por qué no soy feliz? Depresión post-parto, factores que influyen y cómo prevenirla

He tenido un bebé, ¿por qué no soy feliz? Depresión post-parto, factores que influyen y cómo prevenirla

Top Doctors
Escrito por: La redacción de Top Doctors
Editado por: TOP DOCTORS® el 02/06/2019

La depresión post parto es algo más común de lo que creemos, a pesar de que muchas madres no se atrevan a demostrar lo que sienten o sean incomprendidas, porque creen que deben asumirlo todo sin renunciar a nada. La Sra. García Guerra, especialista en Psicología, explica la importancia de acompañar a la madre, reforzar los lazos con su pareja y cómo evitar la depresión post parto

 

He tenido un bebé, ¿qué me pasa? No estoy contenta, ¿por qué? Si es lo mejor que te puede pasar en la vida.

Cuántas mujeres hay que no saben que sufren una depresión post-parto. También que no se atreven a hablar de lo que sienten, ni buscan ayuda, debido a los sentimientos de culpa que acompañan este padecimiento. Cuántas mujeres lo sufren en soledad.

 

Cómo influye la depresión post-parto en el bebé y la relación de la madre con su propia madre

La depresión de la madre puede generar estragos en el bebé, manifestados frecuentemente a través de trastornos funcionales, como son los problemas con la alimentación, el sueño, el control de esfínteres, etc., asociado al problema de relación con la madre.

La manera que tiene la madre de interpretar las señales emitidas por el bebé se encuentra totalmente influida por su estado emocional, las vivencias que tuvo de niña con su propia madre y las representaciones que ella tiene a nivel interno. Desde su nacimiento la niña percibe las emociones de su madre, el placer de ocuparse de ella - bebé-hija - con la concepción de que un día ella será madre. Desde los primeros años de vida, la niña recibe de su madre los cimientos sobre los cuales ella construirá progresivamente su futura identidad de madre.

La depresión post parto es más común de lo que se cree
e influye mucho la relación de la madre con su propia madre

 

Cuánto dura la depresión post-parto y por qué es importante tratarla

La depresión post-parto puede durar de 3 a 14 meses, momento en que el desarrollo afectivo del bebé se encuentra en plena evolución y, a su vez, es la base para establecer relaciones sanas a lo largo de su vida. Al cabo de un año más de la mitad de las mujeres explican no haber recuperado su humor habitual, aunque no tengan diagnóstico de depresión.

Sin tratamiento, el 30% de las depresiones se convierten en crónicas. En estos casos, la depresión pasa desapercibida y la mujer se adapta a su nuevo estado, que imagina propio de su nueva condición de madre.

 

Importancia de sentirse acompañada para evitar la depresión post-parto: reforzar los lazos con la pareja

La mujer que sufre depresión no es responsable de su estado. El sentimiento de culpa, frecuente en esta patología, es consecuencia de la depresión, pero no es la causa. El entorno de la joven madre la puede responsabilizar y esto aumenta el sentimiento de soledad y de incomprensión.

El nacimiento de un hijo puede reforzar la pareja, pero también la puede debilitar, por lo que el matrimonio ha de encontrar un nuevo equilibrio. Cuando uno de los dos sufre depresión, esta nueva estabilidad es más difícil de encontrar y puede ocurrir que la pareja no lo pueda soportar.

 

Presión social o refuerzo de la idea de “asumirlo todo sin renuncias”

Las expectativas de la sociedad no ayudan, sino que lo que hacen es reforzar la idea que la mujer ha de ser capaz de ocuparse de todo sin ninguna renuncia. Todavía más si la madre ha integrado exigencias internas demasiado rígidas o contradictorias y está convencida de que lo ha de asumir todo y de forma perfecta. El riesgo de agotamiento y de desvalorización es importante, entonces, la puerta está abierta a la depresión, con la impresión de no estar a la altura, de tener fuertes sentimientos de culpa.

 

Depresión post-parto en la figura paterna

El padre también revive las relaciones precoces que tuvo con sus propios padres. Los reajustes psíquicos inherentes a este periodo se encuentran con elementos emocionales reprimidos e inconscientes, generando una vulnerabilidad por el hecho de vivir algo a lo que no está habituado y que puede angustiarlo. Es más frecuente que active mecanismos de defensa para negar el sufrimiento, como por ejemplo, refugiarse en el trabajo, salir con los amigos u otro tipo de actividades.

Es necesario poder prevenir y, para ello, hará falta recordar nuestro pasado como hijos para mejorar nuestro presente como padres.

 

Cómo trabajar las expectativas paternales y prevenir la depresión post-parto

Las fantasías parentales están presentes en los padres mucho antes el nacimiento del hijo, por lo que pueden ser trabajadas ya durante el embarazo e incluso antes. Se trata de trabajar con la mujer adulta sobre la niña que ha sido y todavía no sobre el bebé que va a venir. Es entonces cuando la mujer revive ciertas etapas precoces de su historia y se acerca a sus propios padres. Cuando el niño va siendo físicamente perceptible para la madre, empieza progresivamente a existir como objeto “externo” para la madre.

El embarazo y el post-parto revelan a veces un trastorno más antiguo pero aún no tratado. El fenómeno de la transparencia psíquica, descrita por Bydlowski en 1991, propia de este periodo, provoca un resurgimiento de los síntomas y puede constituir una motivación a buscar ayuda. Las fantasías se encuentran mucho más cercanas a la conciencia y las defensas debilitadas. Esto hace a las madres más vulnerables y con tendencia a descompensarse pero también permite una gran movilidad psíquica y los cambios son rápidos.

El embarazo y los meses posteriores al parto suponen un momento particularmente propicio al cambio, debido al estado emocional de la mujer desde que se queda embarazada hasta que el hijo tiene entre un año y medio o dos. Es el periodo por excelencia para realizar un trabajo psicoterapéutico.

Psicología