Infórmate sobre los riesgos de tener un aneurisma de aorta
El aneurisma de aorta abdominal es una enfermedad que se presenta con mayor frecuencia en hombres mayores de 60 años.
Prevalencia de la enfermedad
Si un aneurisma de aorta abdominal no se diagnostica o trata a tiempo, puede romperse y su ruptura se asocia a una alta mortalidad. Sin embargo, es un problema fácil de detectar y posee un tratamiento de gran efectividad. Para detectarlo a tiempo se debe acudir a un especialista en cirugía vascular.
El 7% de la población masculina mayor de 65 años presenta un aneurisma de aorta (desde 4.8% de los hombres a los 60 años al 10.8% en los 80 años).
Un aneurisma es una dilatación de las paredes (agrandamiento) de una arteria. Un aneurisma de aorta abdominal (principal arteria del organismo que sale del corazón) es una dilatación de la aorta mayor a 3 cm. de diámetro. Dicha dilatación se encuentra en el abdomen a nivel del ombligo profundamente ubicado cerca de la columna vertebral.
Los principales factores de riesgo para presentarlo son el sexo masculino, la edad, el tabaquismo, y antecedentes familiares de aneurisma de aorta.
¿Cómo saber si tienes un aneurisma de aorta y qué hacer?
El padecer un aneurisma de aorta es asintomático, hasta la ruptura; la ruptura de un aneurisma produce frecuentemente la muerte. Por ello, está mundialmente recomendado realizarse una ecografía abdominal a partir de los 60 años.
Si el cirujano vascular detectó un aneurisma de aorta pequeño, se debe además de controlar los factores de riesgo cardiovasculares y verificar el tamaño del aneurisma cada seis meses. Pero cuando el aneurisma es mayor de 5 cm se debe definir junto con el especialista qué tratamiento hay que seguir.
Existen diferentes alternativas, lo cual dependerá del tamaño del aneurisma, características clínicas del paciente y anatomía de arterias.
Desde 1990 se ofrecen alternativas menos invasivas (tratamiento endoluminal) para aquellos pacientes que necesitan tratarse. Se ha desarrollado una práctica segura y eficiente para pacientes con dichos aneurismas. Se tratan bajo anestesia local, mediante dos pequeñas incisiones a nivel femoral, colocando una endoprótesis para evitar el gran trauma de la cirugía convencional.