La alopecia tiene solución
La alopecia es la pérdida del cabello en el cuero cabelludo, pero también puede darse en cejas, pestañas o incluso en el vello corporal. Las causas por las que se puede producir una alopecia son múltiples.
La androgenética es la más frecuente y la que preocupa a un mayor número de personas debido a que existe una influencia genética primordialmente. Existen otros muchos factores, como pueden ser los déficits de vitaminas, calcio, y muchos minerales o aminoácidos. Otros factores hormonales también influyen, como las alteraciones tiroideas u hormonas sexuales masculinas, infecciones, estrés, factores psicológicos, y un sinfín de causas más.
Síntomas y tratamiento de la alopecia
El principal síntoma que presenta la alopecia es la disminución o pérdida del cabello. Existen alopecias que siguen un patrón difuso, otras en placas, (como la alopecia areata), en la línea frontal (alopecia fibrosante frontal), otras como apolilladas (sífilis) o en penachos.
Es posible frenar la alopecia, aunque según el tipo, los factores causantes, el factor genético o el autoinmune, determina unas respuestas diferentes del cuerpo al tratamiento. El mejor de ellos varía mucho según la etiología de la alopecia. En hombres, minoxidil, finasteride o dutasterida son los mejores tratamientos y en mujeres postmenopausicas, complejos vitaminicos o 11 alfa hidroxiprogesterona tópica entre otros.
Dicho tratamiento no tiene que ser siempre de por vida. En el caso de la alopecia androgenética, sobre todo si ésta se encuentra en un punto avanzado, el tratamiento suele ser muy prolongado para poder mantener el resultado obtenido si se ha recuperado el cabello.