La enfermedad de Dupuytren
La enfermedad de Dupuytren es una enfermedad de la mano que provoca la flexión progresiva de los dedos, sobre todo del anular y meñique aunque puede afectar a todos los dedos, y que impide que el paciente pueda abrir por completo la mano.
Su aparición puede deberse a múltiples factores, siendo el hereditario uno de ellos. También a veces se asocia con la toma de determinados medicamentos, enfermedades como la diabetes, tabaco, alcoholismo, pero en otras ocasiones no se encuentra ninguna causa relacionada con la aparición de la enfermedad.
Sintomatología de la enfermedad de Dupuytren
En la contractura de Dupuytren existe un engrosamiento del tejido fibroso de la palma de la mano que se encuentra superficial a los tendones flexores, estando los tendones normales aunque el crecimiento de este tejido fibroso impide su movilidad normal.
El comienzo de la enfermedad suele ser indoloro, y puede estar en esta fase durante mucho tiempo. Más tarde pueden comenzar a desarrollarse nódulos en la palma y si la enfermedad sigue desarrollándose se crean cuerdas de tejido fibroso subcutáneo que empieza a limitar la movilidad de la mano. El paciente no puede apoyar la palma de la mano completamente extendida sobre un plano, tiene dificultades para agarrar objetos y abrir por completo la mano. El desarrollo de actividades cotidianas de la vida diaria como comer, estrechar la mano, higiene personal, o desarrollar determinadas actividades manuales se realizan con ciertas dificultades.
Es conveniente acudir a un especialista en Traumatología para la valoración de los síntomas, ya que si se deja evolucionar la enfermedad el tratamiento posterior suele ser más complicado, con mayores riesgos y con peores resultado para el paciente.
¿En qué consiste el tratamiento de la enfermedad de Dupuytren?
El tratamiento de la enfermedad de Dupuytren hoy día en manos de especialistas habituados a ella tiene como objetivo devolver al paciente a una situación en la que pueda realizar una vida NORMAL, sin limitaciones derivadas de la enfermedad. Este objetivo debe conseguirse en la mayoría de los casos.
El tratamiento depende del caso en concreto, pero tenemos distintas opciones, todas ellas intentando que el tratamiento se realice siguiendo los principios de la cirugía mínimamente invasiva, para que el paciente se recupere cuanto antes y pueda volver a sus actividades cotidianas y deportivas con normalidad.
De esta forma las secuelas estéticas son prácticamente inexistentes. Se trata de una cirugía que debe realizarse en el contexto de la cirugía ambulatoria sin necesidad de ingreso ni de hospitalizaciones prolongadas.