La felicidad depende de nosotros mismos

La felicidad depende de nosotros mismos

Top Doctors
Escrito por: La redacción de Top Doctors
Editado por: TOP DOCTORS® el 08/06/2019

Pequeños trucos, guías y consejos para alcanzar una meta universal en todo ser humano: la felicidad y el bienestar.

Tal como reconoce Naciones Unidas, la felicidad y el bienestar son objetivos y aspiraciones universales en la vida de los seres humanos. El camino para alcanzar dichos objetivos ha sido tarea de la filosofía, aunque hoy es evidencia científica, fruto de la neurociencia y la psicología.

Sabemos, por ejemplo, que sólo un 10% de la felicidad depende de las circunstancias externas. Si ganásemos la lotería, sentiríamos al principio un enorme placer, aunque al poco tiempo volveríamos a nuestro nivel de satisfacción anterior, ya que una vez asimiladas las grandes novedades de la vida, las personas suelen volver a su ánimo habitual.

Otro 50% de nuestra felicidad está relacionada con factores genéticos, una tendencia a preocuparse o a no hacerlo, a ser optimista o pesimista o bien, a ser rígidos o flexibles.

La buena noticia es que el 40% de la felicidad depende de nosotros mismos: lo que hagamos, cómo interpretemos lo que nos ocurre, qué habilidades personales practiquemos, nuestras relaciones sociales, rutinas o actividades…

Los ingredientes básicos para conseguir esta felicidad personal consisten en mantener una red de relaciones sociales, encontrarle sentido a la vida, tener unas metas que se correspondan con nuestros valores y disfrutar de lo que hacemos. Para esto último, cada uno ha de buscar lo que le guste hacer, aquella tarea que le haga fluir las horas sin darse cuenta. Por otro lado, de vez en cuando también hay que aventurarse a probar cosas nuevas y salir de la zona de confort.

Tenemos que ser conscientes de nuestro diálogo interior: hay gente que tiende a los pensamientos negativos o a interpretar de manera pesimista lo que le sucede. Por ejemplo, dos personas atrapadas en un atasco pueden interpretar la situación de forma muy distinta; una de ellas se puede sentir atrapada y angustiarse o pensar que siempre le pasan estas cosas, mientras que otra puede decirse que, como va para largo, aprovechará para poner música. Somos responsables de lo que pensamos y, siendo conscientes de ello, podemos cambiar estos pensamientos.

Los expertos también aconsejan disfrutar de los pequeños detalles del momento a través de todos nuestros sentidos, siempre centrándonos en cada instante con plena atención. Además, la gente feliz muestra tendencia a ser abierta y tener menos prejuicios con los demás.

La felicidad no significa ausencia de sentimientos negativos, pero tiene un impacto directo en nuestras vidas: nos hace vivir más tiempo, gozar de mejor salud, ser más creativos y tener mayor éxito. Y sabemos también que nuestra satisfacción vital repercute en la familia y amigos. Como decía la canción de Louis Armstrong “Cuando sonríes, el mundo entero te sonríe”.

Psicología