La principal causa de obesidad mórbida es el sedentarismo
La obesidad mórbida es una enfermedad que tiene lugar cuando el Índice de Masa Corporal (IMC) de una persona es superior a 40. En la cirugía general, se habla de obesidad mórbida cuando el peso alcanzado es tal que disminuye la calidad de vida del paciente, entrañando un riesgo para su supervivencia.
Esta enfermedad está relacionada con otras patologías como: hipertensión arterial, diabetes, hipercolesterolemia, hiperuricemia, insuficiencia cardiaca, insuficiencia respiratoria, síndrome de Picwick, síndrome de sleep-apnea, insuficiencia venosa, varices, insuficiencia articular, artrosis, depresión, alteración de la autoestima, las relaciones sociales y sexuales, incluso algunos cánceres como el de mama, colon, etc.
Causas de la obesidad mórbida
La principal causa de la obesidad mórbida es el sedentarismo, traducido en una ingesta de calorías superior al gasto energético que realizamos, sumado a una tendencia de algunas personas por engordar.
Consecuencias de la obesidad mórbida
Las consecuencias de esta enfermedad son, aparte de las limitaciones físicas y estéticas que conlleva, otras enfermedades graves asociadas ya comentadas, que limitan la calidad de vida y la supervivencia.
Cirugía bariátrica
La cirugía bariátrica, también conocida como cirugía de la obesidad o metabólica, es el mejor tratamiento para la obesidad mórbida. Está indicada para pacientes en los que el IMC es superior a 40kg/m2 o con un IMC mayor a 35 pero con patologías asociadas. Desde hace un tiempo, esta cirugía se realiza también en personas con diabetes tipo 2 y sobrepeso; en este caso pueden operarse a partir de 15kg de sobrepeso.
Esta técnica conlleva la pérdida de peso, lo que provoca cambios en el metabolismo dentro del organismo. El paciente resolverá o mejorará su diabetes, se le normalizará el colesterol o los triglicéridos elevados, mejorará la hipertensión arterial, desaparecerá el síndrome de apnea sueño y otros problemas respiratorios, entre otros.
Este tratamiento supone una mejoría importante en la calidad de vida del paciente, entendida ésta como el aumento y la mayor satisfacción en la actividad física, laboral, psíquica, social y sexual, donde está plenamente implicada la autoestima personal y estética.