La terapia de pareja
Uno de los tratamientos que tienen más demanda en nuestra consulta es la terapia de pareja, incluso diríamos que en los últimos 10 años es de los tratamientos más requeridos, junto con las terapias individuales relacionadas con rompimientos de parejas o dificultades en consecución de parejas y las pautas para padres.
Creemos que los cambios sociales en continuo movimiento provocan inestabilidades en las emociones. Eric Fromm supo definirlo magníficamente ya en “El miedo a la libertad”, en 1940, y aplicable a la sociedad actual: Propugnación de un mundo espontáneo donde la libertad proporciona independencia y racionalidad a los hombres y mujeres, pero que también los aísla. La comunicación emocional, por ensayo y error, coge caminos en sus mapas mentales emocionales, que en ocasiones solo les lleva al punto de partida, aunque por diversos caminos, que en la repetición devuelven más abruptos y empinados.
En ocasiones no pedimos ayuda porque no sabemos exactamente qué falla en nuestra relación. Cuando decidimos pedir hora para realizar nuestra terapia, es interesante ponernos de acuerdo con nuestra pareja en:
- Cuáles son los puntos que queremos exponer al terapeuta y priorizar jerárquicamente lo que viene generando mayor crisis en la relación.
- La pareja tiene que aceptar mutuamente los problemas a tratar en la psicoterapia.
- Las primeras sesiones de trabajo se realizan sobre temas concretos, de forma que esto estimulará a la pareja a seguir, ya que verá cambios y mejorará la autoestima entre ambos.
La terapia
Por parte del terapeuta es importante la definición de los problemas sin ambigüedades y definir y clarificar que el problema o la crisis determinada son el problema, no la persona. Mejorar el dialogo entre los miembros de la pareja, incluso crearlo cuando este es inexistente es la prioridad terapéutica. En ocasiones, si el bloqueo comunicativo está fuertemente arraigado, recomendamos unas sesiones previas individuales para cada uno de los miembros de la pareja. Mediante este tratamiento previo las relaciones y la comunicación en la terapia conjunta mejoran notablemente y el dialogo emocional se vuelve mucho más fluido.
Nuestra metodología es partir del diálogo emocional de la propia pareja, para usar el mismo lenguaje, evitando discrepancias y “malos entendidos y suspicacias” que suelen darse en las terapias de pareja. La experiencia profesional y madurez clínica es un factor añadido en estos tipos de terapia, en el que el bagaje profesional es un master añadido.
Las discusiones y desacuerdos en relación a los hijos suelen invadir la propia relación y en la mayoría de ocasiones, suelen ser algunos de los motivos principales, que con el tiempo han distorsionado las bases relacionales de la pareja, pero sí el vínculo afectivo existe, la terapia será seguro un éxito.