Los apósitos virtuales como método de cicatrización
Los apósitos virtuales (Stable Virtual Skin o Piel Virtual Estable) son la técnica más novedosa para la cicatrización de cirugías. Se trata de láminas estériles (que en un principio se utilizaban en pieles quemadas y con diferentes tipos de abrasiones), que por sus condiciones de flexibilidad y durabilidad pueden permanecer de forma estable sobre la piel permitiendo un proceso de cicatrización cómodo y rápido.
Los apósitos virtuales SVS se utilizan en distintos tipos de cirugía, obteniendo muy buenos resultados. Estas láminas sustituyen las incómodas gasas y vendas y, tienen como ventajas la economía, la seguridad, la comodidad y mejor cicatrización.
Se consiguen mejoras en la economía porque no hay que cambiar las láminas durante un período de diez a catorce días, ni usar gasas, pomadas ni esparadrapos. Hay una alta seguridad porque son estériles y permiten a la herida el paso del aire necesario para la transpiración pero no el de gérmenes. Los apósitos virtuales destacan por su comodidad, las láminas SVS se aplican en quirófano, al final de la intervención quirúrgica. El paciente puede ducharse a diario con su gel habitual y secarse con una toalla limpia la zona intervenida, igual que lo haría con el resto de su cuerpo. Como la herida está protegida, no hay riesgo de infección ni molestias al rozar con la ropa. Los apósitos virtuales, además, consiguen una mejor cicatrización porque mantiene la herida inmóvil y, al ser transparente, se puede vigilar el proceso de cura de forma permanente. Además, tiene una adherencia selectiva y sólo se pega a la piel sana, dejando respirar la herida. Llegado el momento de retirarlo, como se trata de un adhesivo elástico, el paciente no siente ningún dolor.