Mantén el peso perdido con Ultrashape v3 y la dieta instintiva
Ultrashape V3 es un tratamiento no invasivo que, mediante la emisión de ondas acústicas de energía ultrasónica, se realiza para mejorar el contorno corporal y perder peso.
La grasa corporal es totalmente necesaria para nuestro organismo. Se trata de un órgano endocrino que sintetiza y libera sustancias activas fundamentales para nuestro bienestar, además de regular diversos procesos metabólicos del organismo, sobre todo del hígado y del músculo esquelético.
Por otro lado, el tejido adiposo tiene un sistema de control que le permite subministrar energía allí donde es necesaria, participar de forma indirecta en la coagulación sanguínea y regular la presión arterial.
También interviene en el metabolismo de lípidos y glucosa, ya que mantiene una conexión sobre el cerebro que nos ayuda a regular el apetito y la saciedad. Finalmente, contribuye a la formación de hormonas, como andrógenos y estrógenos.
A pesar de todos los beneficios de la grasa, un exceso de esta misma se asocia a un estado inflamatorio general, producido por sustancias que libera la propia grasa y que favorecen la ganancia de peso.
Con Ultrashape V3 podemos controlar el componente inflamatorio de la grasa. Su energía transmite los ultrasonidos permitiendo que se produzca la destrucción de la grasa de forma selectiva, al instante y de forma definitiva, y que permanezca intacta la función beneficiosa del tejido graso.
Ultrashape V3 funciona mediante la emisión de ondas acústicas de energía ultrasónica que convergen en un foco dirigido sólo a las células grasas y a una profundidad controlada que se determina según las características de cada paciente.
Aun así, su acción siempre se debe combinar con el mantenimiento de una dieta saludable que nos ayude a mantener los resultados obtenidos. Por eso, es indispensable comer de forma adecuada. En el siguiente apartado te contamos cómo hacerlo.
La dieta instintiva: comer bien y mantener los resultados
La dieta instintiva se basa en entender y establecer una relación sana con la comida, ya que, además de perder peso, es importante adoptar buenas costumbres alimentarias para poder mantener el resultado obtenido con la dieta.
A causa de nuestras necesidades energéticas, es importante saber repartir nuestro consumo de alimentos a lo largo del día. El desayuno siempre tiene que ser completo, mientras que, durante la cena, es importante no cometer ningún tipo de exceso. Un ejemplo de repartición adecuada sería el siguiente:
1. Desayuno
Café, leche, café con leche, Pan con…,
2. Media mañana
Fruta o yogur descremado, cortado. También podemos tomar un pequeño bocadillo.
3. Comida
Primer plato:
Diariamente, ensalada, verdura o caldo
Segundo plato:
4 días a la semana, carne
3 días a la semana, legumbre, pasta y arroz
En la comida el primer plato debe ser proporcionalmente mayor que el segundo plato.
4. Merienda
Fruta o yogur desnatado o cortado
5. Cena
Primer plato:
Diariamente, ensalada, verdura o consomé.
Segundo plato:
3 días a la semana, pescado (mínimo necesario)
2 días a la semana, tortilla de 2 claras y 1 yema, 2 días a la semana, fruta o yogur (un solo tipo de fruta y se puede combinar con yogur)
En la cena, el segundo plato debe ser proporcionalmente más abundante que el primer plato.
Además, durante los próximos meses, podemos aprovechar las ventajas estacionales que ofrece la primavera, una de las mejores estaciones para el consumo de verduras, hortalizas frescas y fruta. A continuación te detallamos los alimentos recomendados de temporada:
1. Verduras y hortalizas
• Acelgas: lo más frescas posibles, crudas o salteadas en aceite de oliva virgen extra, ricas en potasio
• Alcachofas
• Apio
• Calabaza
• Espárragos trigueros: fritos en aceite de oliva virgen extra o a la brasa, ricos en vitamina C, provitamina A, potasio y folatos.
• Cebollas
• Endivias
• Cebolletas
• Apio
• Coles de Bruselas
• Espinacas
• Guisantes: se pueden comprar frescos, dentro de una vaina y desgranarlos. Salteados con aceite de oliva virgen extra, sal y pimienta, son saludables y exquisitos
• Habas
• Pimientos verdes: ricos en vitamina C, crudos o asados
• Puerros
• Lechugas
• Tomates
• Zanahorias
2. Frutas
• Fresones/fresas : muy ricos en vitamina C, 200 gr ya nos aportan algo más que la cantidad diaria recomendada de esta vitamina
• Peras de todo tipo
• Limones
• Pomelo
• Manzanas
• Ciruelas Claudia: dulces y ricas en fibra, no tan calóricas como se piensa.
3. Pescados y mariscos
• Rape
• Merluza
• Trucha
• Atún
• Centollo: ricos en cinc y yodo, como la mayoría del marisco.
• Caballa: pescado azul, rico en ácidos grasos Omega 3, cuanto menor sea su tamaño, mejor
• Ostras: muy ricas en cinc y hierro, nutrientes fundamentales para una buena nutrición cerebral
Incorporar a nuestra dieta diaria los alimentos de temporada más adecuados a cada época del año es la mejor forma de garantizar que nuestro organismo reciba regularmente los saludables componentes que aportan unos productos que, justo en esos momentos, se encuentran en sus mejores condiciones de frescura, además de contribuir al mantenimiento de una agricultura sostenible y a la protección del medio ambiente.