Ojo con la diabetes: consecuencias y tratamiento de la enfermedad
La diabetes afecta a unos 400 millones de personas en el mundo, la mitad de ellas sin diagnosticar. Para el año 2040 se estima que habrá en el mundo 640 millones de personas con diabetes. Esta epidemia del siglo XXI se debe a los cambios en los hábitos de vida, caracterizados por el sedentarismo y un un exceso en nuestra dieta de alimentos y bebidas ricos en azúcares y de grasas saturadas.
Aumento de la diabetes en el País Vasco
Aunque el aumento de la diabetes es mayor en los países en desarrollo en los que se doblará la frecuencia de la enfermedad, en España y el País Vasco también se padece este aumento: hemos pasado a duplicar la prevalencia de diabetes tipo 2 desde el año 2000 al año 2011.
A esta cifra tendríamos que sumar la de las personas con diabetes sin diagnosticar, que suponen casi la mitad del total de las personas con diabetes. En el año 2010 la diabetes total (conocida más la desconocida) fue del 10,6% en el País Vasco. Existen además un pequeño porcentaje de personas con prediabetes, es decir, con riesgo muy elevado de desarrollar la enfermedad.
Consecuencias de la diabetes
Las personas con diabetes y prediabetes tienen con mayor frecuencia otros factores de riesgo cardiovascular asociados como la hipertensión, y niveles de colesterol y triglicéridos elevados.
Es importante señalar que en personas con prediabetes (riesgo elevado de desarrollar diabetes) se puede reducir el riesgo de padecer diabetes en más de la mitad de los casos, con medidas de cambios de hábitos de vida y ejercicio.
La diabetes se caracteriza por el desarrollo de complicaciones crónicas que la convierten en causa principal de enfermedad cardiovascular, ceguera, fallo renal y amputación de extremidades inferiores.
En el País Vasco la causa principal de muerte en las personas con diabetes tipo 2 es la muerte cardiovascular, que supone alrededor de la mitad. El riesgo de mortalidad cardiovascular se multiplica por 3 en personas con diabetes comparado con la población general de nuestro País.
Más de un tercio de las personas que viven actualmente con diabetes tipo 1 o tipo 2 desarrollarán alguna forma de daño en sus ojos que puede ocasionar ceguera.
Diagnóstico de la diabetes
Muchas personas viven con diabetes tipo 2 un largo periodo de tiempo sin ser conscientes de su condición. Para cuando son diagnosticadas, las complicaciones de la diabetes pueden estar ya presentes. En el País Vasco, en el momento del diagnóstico, el 14 % de las personas con diabetes tipo 2 ya tienen enfermedad cardiovascular y el 7% retinopatía diabética.
Es primordial por tanto, diagnosticar cuanto antes a las personas con diabetes para así modificar el curso de la enfermedad y reducir el riesgo de complicaciones. El cribado o estudio periódico de la posible presencia de complicaciones es una parte esencial del control de la diabetes tipo 1 y tipo 2.
Estas complicaciones de la diabetes se pueden prevenir o retrasar manteniendo los niveles de glucosa en sangre, presión arterial y colesterol tan normales como sea posible. Una vez detectada la complicación mediante exámenes periódicos entre los que habría que incluir la detección de retinopatía diabética, podemos tratarla para frenar la progresión a estadios más severos. Un control cuidadoso de la diabetes y la detección de la enfermedad diabética de los ojos pueden ayudar a prevenir la discapacidad visual y la ceguera.
Tratamiento de la diabetes
La dieta y el ejercicio son la base del tratamiento de la diabetes. Los fármacos y las nuevas tecnologías han experimentado una auténtica revolución en la última década que está transformando y mejorando el manejo de esta enfermedad.
Se han desarrollado nuevas insulinas de acción lenta, con un perfil de acción más plano y duradero que permiten menor variabilidad glucémica y menor riesgo de hipoglucemias. Están en desarrollo insulinas rápidas ¨más rápidas¨ que permitirán, administrándolas antes de la comidas, un mejor control de la glucosa con menores elevaciones de ésta después de la ingesta.
Asimismo, para el tratamiento de la diabetes tipo 2 contamos con nuevos antidiabéticos orales y fármacos inyectables que consiguen mejorar el control glucémico con menor riesgo de hipoglucemias, favorecen la perdida de peso, y reducen otros factores de riesgo cardiovascular asociados como la tensión arterial. Estos nuevos tratamientos están demostrando además seguridad cardiovascular y algunos de ellos disminución del riesgo de desarrollar enfermedad o muerte cardiovascular en personas con diabetes con muy alto riesgo cardiovascular. Este hecho es importante ya que la enfermedad cardiovascular es la complicación más devastadora de la diabetes.
Avances en el tratamiento de la diabetes
Las nuevas tecnologías, como los sensores con monitorización flash que muestran los niveles de glucosa durante 24 horas, permiten una vigilancia estricta de los niveles glucémicos que favorece el control de la enfermedad ayudando así a reducir las complicaciones y los tiempos en los que los pacientes con diabetes tipo 1 pasan en hipoglucemia.
Las bombas de infusión continua de insulina son dispositivos que permiten un mejor control de la glucemia a aquellas personas que no lo consiguen con multidosis de insulina.
Está muy avanzado el desarrollo de sistemas de asa cerrada: mediante un sensor en la piel miden de forma continua el nivel de glucosa subcutánea y esta información se traslada a un terminal que lleva la persona en el que un microchip con un algoritmo matemático le ordena a una bomba de infusión continua de insulina la cantidad de esta hormona que se tiene que dispensar según el nivel de glucosa en cada momento. Aunque estos sistemas no sean de uso general, suponen una gran ayuda para algunos pacientes y van a representar un cambio de paradigma en el tratamiento de la diabetes en un futuro no muy lejano.
En cualquier caso, la educación de las personas con diabetes dirigida a conseguir hábitos de vida saludable, automedida y autocontrol de la glucemia y sus factores de riesgo asociados, son esenciales para controlar la enfermedad y evitar sus complicaciones. El manejo de esta epidemia es una tarea multidisciplinar y en ella se requiere la intervención de médicos, enfermeras educadoras, dietistas, psicólogos, podólogos y autoridades sanitarias.