Realidades sobre la dificultad para conseguir el embarazo
Muchos pacientes que acuden a las consultas de ginecología tienen dudas al tener problemas para concebir, ya que se encuentran con que lograr el embarazo no es tan facil o tan rápido como se pensaba.
La infertilidad afecta al 15% de las parejas en edad reproductiva en España, por lo que casi un millón de parejas necesitan acudir a las consultas de Reproducción Asistida para lograr el embarazo.
Tener dificultad para quedarse embrazada puede deberse a muchos factores, de los cuales uno de los más importantes es la edad de la mujer, ya que a 
los 35 años tiene un 10% de posibilidades de quedarse embarazada cada mes, bajando esta cifra al 5% a los 40 años. No obstante, cabe destacar que esto no significa que una mujer de más de 35 años no pueda tener hijos, sino que necesitará más tiempo intentándolo para lograrlo.
Desde un punto de vista biológico, la edad ideal para concebir en una mujer es entre los 20 y los 25 años, aunque no debería haber ningún problema hasta los 35 en ellas y los 50 en ellos. Teniendo en cuenta que, con el actual estilo de vida, las mujeres se ven obligadas a retrasar la maternidad hasta casi los 40, esto dificulta el embarazo.
De todos modos, es importante saber que el 85% de las parejas en edad reproductiva que tienen relaciones sin protección consiguen el embarazo tras 12 meses intentándolo, y que tan sólo el 20% de las mujeres se quedan embarazadas en el primer mes de intentarlo. Así pues, se recomienda esperar al año antes de acudir a una consulta de Reproducción Asistida.
También es importante desmentir dos mitos: por un lado, no cuesta más lograr el embarazo justo después de tomar las píldoras anticonceptivas, ya que se puede concebir al cabo de un mes tras dejar de tomarlas; por otro lado, no hay ciertas posturas sexuales que favorecen la fecundación.
Problemas para lograr el embarazo: infertilidad y esterilidad
Por un lado, la infertilidad ocurre cuando una mujer tiene dificultades para lograr el embarazo y, una vez logrado, no se ha llegado a término o se ha producido el fallecimiento del bebé después del parto. Puede ser de dos tipos:
- Infertilidad primaria: el embarazo no llega a término o se produce el fallecimiento del bebé poco después del parto.
- Infertilidad secundaria: la mujer tiene un bebé sano, pero cuando vuelve a buscar otro embarazo, la gestación no llega a término.
Por otro lado, la esterilidad es la imposibilidad de conseguir el embarazo. Generalmente se considera que una pareja es estéril cuando no logran el embarazo tras un año teniendo relaciones sin métodos anticonceptivos. También se distingue entre dos tipos:
- Esterilidad primaria: ocurre cuando una pareja nunca ha conseguido tener un hijo.
- Esterilidad secundaria: se considera cuando una pareja ya ha tenido hijos pero no logra conseguirlo de nuevo.
La esterilidad puede ser causada por factores externos como el estrés o los hábitos de vida y de alimentación de la pareja.