Ser madre soltera: dudas frecuentes
La aceptación y la consolidación de nuevos modelos familiares en la sociedad, los problemas administrativos, la incorporación de la mujer al mercado laboral o la dificultad para encontrar pareja estable hacen que el tratamiento de fertilidad para ser madre sin pareja masculina sea cada vez más habitual.
¿Quién elige ser madre sola?
Ser madre sola siempre es una elección muy meditada. Los modelos familiares han evolucionado y se han adaptado a las diferentes formas de vida actuales, y es por eso que cada vez es más habitual que las mujeres decidan cumplir su deseo de ser madres, sin contar con una pareja a su lado. Actualmente es una opción totalmente viable debido a la independencia económica que muchas mujeres han alcanzado.
Existen diversos perfiles de mujeres que deciden ser madres solas; en algunos casos son mujeres que por motivos laborales o personales han retrasado su maternidad, o puede tratarse de mujeres que ya tienen hijos pero desean repetir la experiencia y se encuentran sin pareja masculina en ese momento.
¿Por qué someterse a un tratamiento de fertilidad para ser madre sola?
Alrededor de 1.500 mujeres solteras recurren a tratamientos de reproducción asistida cada año según datos de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF). Esto se debe a que, aunque la adopción también es otra posibilidad, los tratamientos de fertilidad posibilitan, mediante el uso de un banco de semen, que las mujeres solteras puedan ser madres, bien con sus propios óvulos o con los de una donante anónima, según cada caso.
Tratamientos para ser madre sola
Las mujeres que deciden ser madres solas mediante un tratamiento de reproducción asistida deben acudir a un centro de medicina reproductiva para someterse a un análisis de fertilidad. En función de los resultados, los especialistas determinarán qué tipo de tratamiento es el más conveniente en cada caso.
Los tratamientos indicados en los casos de mujeres sin pareja masculina son:
- Inseminación artificial con semen de donante (IAD). Consiste en introducir los espermatozoides de un donante anónimo en el útero de la mujer. Antes de proceder al tratamiento, la mujer se suele someter a una estimulación ovárica moderada y a controles ecográficos para la monitorización del crecimiento folicular y la detección de sus días más fértiles.
- Fecundación in vitro (FIV) con semen de donante. Los óvulos de la mujer se obtienen gracias a la punción folicular posterior a la estimulación ovárica y son inseminados en el laboratorio con semen de donante. Los embriones que se obtienen son transferidos al útero de la futura madre.
- Ovodonación. Se trata de la fecundación de los óvulos de una donante con semen de un donante masculino. El embrión obtenido se transfiere al útero de la mujer receptora. Esta técnica es especialmente recomendada en casos de mujeres con baja reserva ovárica o con problemas en la función ovárica.
- Embrioadopción. Si una mujer quiere ser madre sola puede consultar la posibilidad de adoptar el embrión de una pareja que, tras haberse sometido a un tratamiento de reproducción asistida y haber resultado exitoso, ha decidido donar sus embriones.
¿Cubrirá la Seguridad Social mi tratamiento de fertilidad para ser madre sola?
Toda mujer mayor de 18 años con plena capacidad de obrar puede recibir o ser usuaria de las técnicas de reproducción asistida, independientemente de su estado civil y su orientación sexual, según la Ley 14/2006 sobre técnicas de reproducción humana.
Por lo tanto, las mujeres sin pareja masculina pueden acceder a este tipo de tratamientos, así como los matrimonios heterosexuales y homosexuales femeninos, y las parejas de hecho heterosexuales, no solo por problemas de fertilidad, sino también por asuntos de planificaciónvital, por la elección de formar una familia monoparental o bien por aplazamiento de la maternidad.
Sin embargo, dependerá de cada comunidad autónoma que la Seguridad Social cubra o no el tratamiento de fertilidad, hecho que preocupa a las mujeres que se plantean ser madres solas.
¿Qué requisitos son necesarios para someterse a un tratamiento de fertilidad?
Como norma general, se tiene muy en cuenta la edad de la futura madre para que la Seguridad Social cubra el tratamiento de fertilidad. La mujer debe tener menos de 40 años en el caso de la fecundación in vitro y menos de 38 para la inseminación artificial, así como contar con ovarios funcionales.
En el caso de las limitaciones, existen diversos parámetros que impiden someterse al tratamiento:
- Superar la edad establecida
- Haberse sometido previamente a una ligadura de trompas
- Superar 4 intentos de inseminación
- Superar 3 intentos de fecundación in vitro
No obstante, las limitaciones y los requisitos pueden variar en función de la comunidad autónoma.