Soplos cardíacos en la infancia
Los soplos cardíacos son elementos diagnósticos centrales para sospechar la existencia de una cardiopatía congénita, cuya incidencia es del 1%.
La auscultación de un soplo en Pediatría es un hallazgo bastante frecuente. Se trata de un ruido extra que se detecta en la auscultación del niño y se estima que hasta un 80 % de los niños lo presentará en alguna etapa de su vida.
Los soplos se clasifican en una escala de intensidad de 1 a 6, siendo el grado 1 el que apenas puede oírse y el 6 el que se oye muy fuerte.
El principal problema al que nos enfrentamos ante un niño con un soplo es determinar si éste es patológico o no. Es por ello que, la derivación a un Cardiólogo con experiencia en Cardiopatías Congénitas es una opción muy adecuada para el correcto diagnóstico del tipo de soplo y la exclusión de cualquier cardiopatía que hiciese que el niño precise un tratamiento y seguimiento específico de su patología.
Evaluación del soplo cardíaco en niños
- Anamnesis: La presencia de cualquiera de estos hallazgos exige una evaluación más completa del niño:
- Soplo en las primeras 48 horas de vida y de forma recomendable en lactantes (ya que 1 de cada 7 lactantes con soplo tienen cardiopatía subyacente).
- En neonatos y lactantes, dificultad para alimentarse, mal incremento ponderal, síntomas respiratorios inexplicables o cianosis. En escolares y adolescentes, la presencia de dolor torácico, síncope, intolerancia al ejercicio o palpitaciones.
- Antecedentes del embarazo: prematuridad, Diabetes Mellitus tipo 1 materna, infecciones o toma de medicamentos.
- Antecedentes Familiares: cardiopatías congénitas, miocardiopatía hipertrófica y muerte súbita en menores de 40 años.
- Examen Físico General: La existencia de cualquiera de estos hallazgos exige una evaluación más detallada:
- Piel: cianosis.
- Configuración del tórax: asimetrías, malformaciones, escoliosis.
- Tipo de respiración: taquipnea.
- Peso y talla: mal incremento estaturo-ponderal.
- Presión Arterial: parámetros asimétricos (controlar en las 4 extremidades buscando coartación aórtica).
- Palpación de precordio y ápex: desplazamiento puede indicar cardiomegalia.
- Palpación de hígado: signos de insuficiencia cardíaca congestiva.
- Dismorfias (25 % se asocian a cardiopatía congénitas).
- Auscultación: Una auscultación puede considerarse como patológica cuando cumple uno de estos criterios:
- Soplo pansistólico.
- Clicks proto o mesosistólicos.
- Alteración del segundo ruido.
- Soplo diastólico.
- Intensidad mayor a III/VI.
- Calidad áspera o ruda.
Soplo inocente versus soplo patológico
Los Soplos Inocentes se definen como aquellos que se auscultan en un corazón absolutamente normal, durante la infancia o adolescencia, y que no tiene ninguna trascendencia clínica. La literatura hace la diferencia con Soplo Funcional, el que define como aquel soplo presente en un corazón sano, pero que se presenta en forma secundaria a una patología no cardíaca (ej.: tirotoxicosis, anemia, fiebre).
Características de los soplos inocentes
En términos generales los soplos funcionales comparten algunas características en común, que permite su sospecha:
- Se auscultan en niños sin actividad precordial.
- Auscultación del primer ruido (R1) normal.
- Puede auscultarse una disociación del segundo ruido (R2), pero que se modifica con la respiración.
- Al auscultar con el niño en posición supina, el soplo se escucha “en diamante”.
- Al auscultar al niño de pie, la intensidad del soplo disminuye.
- Con excepción del “Hum” venoso, todos los soplos funcionales son sistólicos.
¿Cuál es la conducta más adecuada ante un soplo?
- Ante la presencia de signos de alerta: derivar a un Cardiólogo con experiencia en Cardiología Infantil para la realización de Ecocardiografía ya que es el método que tiene una sensibilidad y especificidad que ronda el 100%.
- Ante la ausencia de signos de alerta, habrá que diferenciar según la edad del niño:
- Menores de 6 meses: si existe una alta sospecha de Estenosis Fisiológica de Ramas Pulmonares es planteaba control hasta los 6 meses. Si el soplo no desaparece, derivar al cardiólogo.
- Entre los 6 meses y los 2 años: derivar al cardiólogo todos los soplos, considerando la dificultad que se presenta al examinar a estos niños y que 1 de cada 7 será patológico.
- Mayores de 2 años: asumir como soplo inocente y educar a los padres en relación a la normalidad de la condición y la ausencia de restricciones. No obstante en la mayoría de los casos se suele derivar al cardiólogo para confirmar la ausencia de patología mediante la realización de Ecocardiografía-Doppler-Color.
La importancia del cardiólogo en los soplos cardíacos
La auscultación es el método diagnostico inicial en los soplos inocentes, sin embargo es requisito complementarla con una anamnesis y un examen físico completo, y dirigido a buscar signos de alarma.
La derivación al cardiólogo con experiencia en Cardiología y Ecocardiografía Infantil se debe realizar en caso de duda diagnóstica y siempre a los niños entre 6 meses y 2 años.
El Ecocardiograma es el método de elección para descartar cardiopatía congénitas.