Todo lo que debes saber sobre la colposcopia
Colposcopia es la exploración de la vagina y el cuello del útero mediante una óptica que amplifica las imágenes. La Dra. Santillán, experta en Ginecología, habla sobre esta prueba que permite diagnosticar precozmente lesiones premalignas y malignas de la vagina y el cuello de útero.
Diagnóstico del cáncer de cuello de útero
El cáncer de cuello de útero es el segundo cáncer ginecológico más frecuente en mujeres después del de mama y el cuarto cáncer más frecuente en mujeres. Tiene una historia natural bastante constante, por lo que el diagnóstico precoz es fundamental. La infección del virus del papiloma humano se encuentra casi siempre como factor predisponente.
El diagnóstico precoz del cáncer de cuello de útero se realiza fundamentalmente por citología. Es decir, se toman células del cuello del útero, se tiñen (Tinción de Papanicolaou) y se observan al microscopio. Sin embargo, la capacidad diagnóstica de la citología es limitada y no siempre detectas células premalignas o malignas.
Cuándo se realiza la colposcopia
La colposcopia es obligatoria realizarla cuando una citología anormal, ya que es necesaria para poder realizar una biopsia, es decir, tomar una mayor cantidad de tejido para confirmar el diagnóstico, pero esta no es la única indicación. La colposcopia siempre es una herramienta útil e inocua para mejorar el diagnóstico precoz del cáncer de cuello de útero. La sensibilidad de la citología para detectar lesiones es entre 5 y 9 de cada 10 casos. Este porcentaje es así de amplio porque depende de cómo se realice la toma. Para realizarla correctamente es muy importante la correcta visualización de la zona de transformación. Esto se consigue siempre que se complementa la citología con la colposcopia; pero por desgracia sólo se consigue la mitad de las citologías que se realizan sin colposcopia.
En qué consiste la colposcopia
Cuando se realiza una colposcopia se debe administrar ácido acético que permite detectar zonas de infección por el virus del papiloma humano. Por último, la colposcopia se finaliza con la aplicación de una solución de lugol (Test de Schiller) con la que se tiñe todo el tejido sano y que tiene glucógeno.
Por todo ello, la colposcopia es una técnica inocula y sencilla que mejora la capacidad diagnóstica de la citología con consigue una sensibilidad de casi el 100 por cien en es screening del cáncer de cuello de útero.