Tratamiento quirúrgico de la hipertrofia prostática benigna
El tratamiento quirúrgico de la hipertrofia prostática benigna tiene por objeto la eliminación del adenoma obstructivo una vez que el tratamiento farmacológico no ha cumplido sus expectativas, no se quieren padecer los efectos secundarios del mismo o hay un progreso en la enfermedad.
Las posibilidades actuales son:
• La adenomectomía abierta o laparoscópica.
• La resección transuretral.
• La "vaporización" transuretral.
• La "enucleación" transuretral.
La adenomectomía abierta fue la primera en el tiempo: Freyer (1900) y Millin (1946). Tiene vigencia en la actualidad y sus excelentes resultados funcionales a largo plazo se tratan de imitar por las demás técnicas. Su mayor agresividad le ha relegado para el tratamiento de próstatas muy voluminosas. Puede reproducirse por vía laparoscópica, de menor agresividad pero de mayor complejidad técnica.
Por su parte, la resección transuretral comenzó con McCarthy en 1945. Es el procedimiento más generalizado y ha evolucionado a lo largo de los años con mejoras instrumentales – resector- y de fuentes de energía eléctrica que permiten el uso de suero salino. Consigue eliminar el adenoma desde la luz uretral, cortándolo en fragmentos.
La vaporización transuretral consigue eliminar el adenoma también desde la luz uretral, vaporizándolo. Para ello se comenzó a utilizar la energía láser en diversas modalidades - verde, rojo, de tulio, etc.-; ha tenido una amplia difusión en pocos años, gracias a su mínima agresividad y poco sangrado. Las desventajas son; su coste elevado y la dificultad para tratar próstatas voluminosas. Desde 2008 se dispone de un vaporizador por plasma que con los mismos resultados tiene un coste reducido.
Finalmente, la enucleación transuretral trata de reproducir la cirugía abierta pero a través de la uretra. La técnica fue descrita por P. Gilling en 1998, que utilizaba el láser de holmio para enuclear y un morcelador para extraer los lóbulos enucleados. Permite tratar próstatas voluminosas. Es una técnica más compleja y de coste elevado. En 2011 comenzamos a desarrollar una nueva técnica – Enucleación Transuretral por plasma - basada en la anterior, empleando un vaporizador por plasma para enuclear y un asa convencional para eliminar los lóbulos enucleados, todo ello con una sola herramienta - resector de Olympus-, con menor coste y menor complejidad de realización.