Tratar las varices es una cuestión de estética y salud
La aparición de varices es una de las patologías más frecuentes —estudios recientes señalan que afecta entre un 10% y un 15% de la población—, siendo más común entre las mujeres a partir de los 30 años de edad.
Las varices aparecen normalmente en las piernas cuando las válvulas venosas que permiten que la sangre fluya hacia el corazón dejan de funcionar correctamente. Como resultado, la sangre se acumula en las venas dificultando la circulación y provocando la dilatación de éstas, que se manifiestan de forma visible. Las varices no sólo afectan de manera estética, sino que suponen un problema para la salud ya que producen síntomas de pesadez, cansancio, edema, picores, hormigueos y calambres en las piernas.
Si no se tratan adecuadamente por un Cirujano General, con los años aparecen complicaciones como úlceras, tromboflebitis, pigmentación de la piel y varicorrágias.
Causa de las varices
Normalmente existe un factor genético que influye en la aparición de las varices, así como estados en que se ve afectada la circulación, como el embarazo, obesidad, sedentarismo o menopausia, que pueden desencadenar la aparición de las varices.
Cómo eliminar las varices
El tratamiento de varices siempre ha sido quirúrgico, y ha evolucionado desde la extirpación de venas varicosas a métodos mínimamente invasivos, como la técnica CHIVA, Endoláser y radiofrecuencia.
La mejor alternativa a la cirugía es la Esclerosis ecoguiada con microespuma.
Esta técnica consiste en inyectar microespuma dentro de la vena, capaz de hacerla desaparecer. El tratamiento se inicia con la localización de las venas varicosas mediante un estudio Eco-Doppler color y con una punción ecoguiada se aplica la microespuma solamente en las venas afectadas, sin necesidad de anestesia.
Recuperación de la Esclerosis ecoguiada con microespuma
Después del tratamiento se puede hacer vida normal llevando una media elástica de compresión durante unas dos semanas.
Normalmente la esclerosis con microespuma ecoguiada es una solución permanente. Aunque en los casos de varices muy grandes, con los años se pueden volver a recanalizar, y si esto ocurre se vuelven a esclerosar. El paso del tiempo puede hacer que aparezcan otras venas varicosas que no tienen ninguna relación con las venas ya esclerosadas y eliminadas.
La efectividad del tratamiento es del 94% y el grado de satisfacción de los pacientes es excelente.
