Cirugía Endocrina

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Escrito por: La redacción de Top Doctors
Creado: 2024-05-24

¿Qué es la Cirugía Endocrina?

La Cirugía Endocrina aborda las enfermedades que afectan a las glándulas endocrinas, las cuales son responsables de producir hormonas vitales para regular diversas funciones del cuerpo humano. Entre las glándulas endocrinas más comúnmente tratadas se encuentran:

  • Glándula tiroides: Situada en la parte frontal del cuello, consta de dos lóbulos conectados por un istmo. Es fundamental para la producción de hormonas tiroideas que regulan el metabolismo, el crecimiento y otras funciones corporales
  • Glándulas paratiroides: Se encuentran adyacentes a la glándula tiroides, localizadas en la parte posterior y a cada lado de la misma. Son responsables de secretar hormona paratiroidea, que regula los niveles de calcio en la sangre, esencial para la salud ósea y otros procesos metabólicos
  • Glándulas suprarrenales: Ubicadas encima de los riñones, producen hormonas como la adrenalina, los corticoides, la aldosterona y una parte de las hormonas sexuales. Estas hormonas desempeñan un papel crucial en la respuesta al Estrés, la regulación del metabolismo, la función cardiovascular, entre otras



¿Por qué se realiza?

La Cirugía Endocrina se realiza para abordar una variedad de trastornos que afectan a las glándulas endocrinas, cada uno con sus propias manifestaciones y necesidades de tratamiento específicas.


Los problemas de la glándula tiroides pueden abarcar desde un agrandamiento benigno, conocido como Bocio, hasta Trastornos Hormonales como el Hipertiroidismo (exceso de hormona tiroidea) o el Hipotiroidismo (deficiencia de hormona tiroidea). En algunos casos, puede desarrollarse Cáncer de Tiroides. La cirugía puede ser necesaria cuando los Trastornos Hormonales no responden al tratamiento médico convencional.


En el caso de las glándulas paratiroides, el Hiperparatiroidismo, caracterizado por un exceso de la hormona paratiroidea (PTH), puede conducir a la movilización excesiva de calcio desde los huesos hacia la sangre. Este trastorno a menudo requiere Cirugía para extirpar las glándulas paratiroides afectadas.


Por otro lado, la sobreproducción de hormonas por parte de las glándulas suprarrenales puede dar lugar a diversas afecciones. Por ejemplo, el Síndrome de Cushing resulta del exceso de glucocorticoides, mientras que el Síndrome de Conn se caracteriza por niveles elevados de aldosterona. La Cirugía puede ser necesaria para tratar estos Síndromes cuando no se pueden controlar adecuadamente con medicamentos u otras terapias.


¿En qué consiste?

El procedimiento quirúrgico puede variar dependiendo de la glándula afectada y la naturaleza de la enfermedad. Por ejemplo, en el caso de la tiroides, la Cirugía puede implicar la extirpación parcial (Lobectomía) o total (Tiroidectomía) de la glándula, mientras que, en las glándulas paratiroides, la Cirugía puede implicar la extirpación de una o varias glándulas hiperfuncionantes o la exploración para identificar y extirpar un adenoma paratiroideo.


La Cirugía Endocrina se realiza típicamente bajo Anestesia General y puede implicar incisiones en el cuello, el abdomen o en otras áreas, dependiendo de la ubicación de la glándula afectada. En muchos casos, se utilizan técnicas mínimamente invasivas, como la Cirugía Laparoscópica o la Cirugía Robótica, que implican incisiones más pequeñas.


Preparación para el procedimiento

Antes de someterse a una Cirugía Endocrina, es fundamental realizar una serie de pruebas preoperatorias estándar para evaluar la salud del paciente y garantizar una intervención segura. Estas pruebas generalmente incluyen:

  • Electrocardiograma
  • Radiografía de Tórax
  • Análisis de Sangre para evaluar la función renal, hepática y otros parámetros hematológicos relevantes


Además, pueden ser necesarios estudios complementarios más especializados, dependiendo de la naturaleza de la cirugía y las condiciones médicas del paciente.


Por lo general, se indica a los pacientes que se abstengan de comer o beber cualquier líquido durante al menos 8 horas antes de la Cirugía. Este período de ayuno ayuda a reducir el riesgo de complicaciones durante la Anestesia.


Cuidados tras la intervención

Durante la primera semana posterior a la Cirugía, se recomienda mantener una higiene mínima en la zona intervenida. Se puede realizar un lavado secuencial cada 2 días, asegurándose de aplicar un antiséptico en la zona operada después de retirar el apósito protector durante la ducha.


Después de esta primera semana, se puede comenzar a lavar la herida a diario con agua y jabón neutro para mantener una adecuada limpieza y evitar infecciones.


En cuanto a la alimentación, se debe seguir una dieta similar a la que se mantuvo en el hospital, con al menos tres comidas diarias. Es crucial mantenerse bien hidratado y evitar cambios bruscos en la dieta que puedan afectar la recuperación del organismo.


Las restricciones de movilidad suelen ser leves, aunque es común experimentar dolor o rigidez en la zona operada durante los primeros días. Es fundamental seguir las indicaciones del Cirujano respecto al reposo y la reincorporación gradual a las actividades diarias.


Es recomendable evitar esfuerzos excesivos y seguir un plan de recuperación personalizado para garantizar una adecuada rehabilitación postoperatoria.


Alternativas a este tratamiento

Algunas de las alternativas comunes incluyen:

  • Tratamiento médico: Los medicamentos pueden ayudar a controlar los síntomas y a mantener los niveles hormonales dentro de rangos saludables
  • Terapia con yodo radiactivo: Esta opción implica la administración de yodo radiactivo por vía oral, que se concentra en las células tiroideas y las destruye
  • Observación activa: Se requiere monitorear regularmente el tamaño y la función de la glándula sin intervenir quirúrgicamente a menos que sea necesario
  • Procedimientos Mínimamente Invasivos: Estos procedimientos pueden ofrecer una recuperación más rápida y menos complicaciones en comparación con la Cirugía Convencional


¿Qué especialista lo realiza?

La Cirugía Endocrina es realizada por un Endocrinólogo o un Cirujano Endocrino. Estos profesionales han recibido entrenamiento adicional específicamente en el tratamiento quirúrgico de las enfermedades que afectan a las glándulas endocrinas.


Es importante buscar a un cirujano con experiencia y capacitación en cirugía endocrina para garantizar un tratamiento adecuado y seguro.