¿Qué es una Fístula Anal?
Una Fístula Anal es un pequeño canal o túnel que se desarrolla entre el final del intestino y la piel cerca del ano (es decir, donde las heces salen del cuerpo). Estos pueden provocar sangrado al defecar y causar Dolor e incomodidad. A menudo, las fístulas anales no mejoran por sí solas y, por lo general, requieren tratamiento. La cirugía es una recomendación común para el tratamiento de las Fístulas Anales.
Síntomas de la Fístula Anal
Debemos plantearnos la posibilidad de tener una Fístula Anal cuando detectamos los siguientes síntomas:
- Sangrado
- Dolor e hinchazón en el ano
- Dolor al defecar
- Irritación en la piel perianal
- Escalofríos, Fiebre y cansancio
Tipos de Fístulas Anales
Para diferenciar las Fístulas Anales se utiliza la clasificación de Parks, que las separa en:
- Interesfinterianas
- Transesfinterianas
- Supraesfinterianas
- Extraesfinterianas
Esta clasificación, sin embargo, no incluye las Fístulas Subcutáneas y la Fístula Compleja. En esta categoría se encuentran aquellas que precisan de un tratamiento con mayor número de recidivas o de trastornos de continencia; así como aquellas provocadas por enfermedades con tendencia a recidivar.
Diagnóstico de la Fístula Anal
La Fístula Anal se diagnostica con la examinación por parte del médico especialista. A veces, sin embargo, la fístula puede no ser perceptible a simple vista y requerirse otras pruebas para detectarla, como la Anuscopía, la Ecografía o la Resonancia Magnética. Por otro lado, si se sospecha de la presencia de otras enfermedades (como la Enfermedad de Crohn) puede ser necesaria una Rectocolonoscopía.
Tratamiento de la Fístula Anal
La cirugía es la única opción de eliminar la Fístula Anal. Por otro lado, para prevenirlas se deben tener en cuenta la higiene de la zona, la dieta y el sedentarismo.
Especialista
El experto en la Fístula Anal es el Coloproctólogo.