Inestabilidad de la Rótula

¿Qué es la Inestabilidad de la Rótula?

La Inestabilidad de la Rótula es una condición en la cual la rótula (también conocida como patela) se sale de su posición normal en el surco troclear del fémur. Esto puede ocurrir de forma parcial (subluxación) o completa (Luxación), causando dolor, inflamación e Inestabilidad en la Rodilla.

Pronóstico de la enfermedad

El pronóstico de la Inestabilidad de la Rótula varía según la gravedad de la condición, la presencia de factores de riesgo y la respuesta al tratamiento. En muchos casos, con un tratamiento adecuado, se puede lograr una recuperación completa y una vuelta a la actividad física. Sin embargo, si no se trata, puede llevar a complicaciones como el daño del cartílago articular y la Artrosis.

Síntomas

Los síntomas más comunes de la inestabilidad de la rótula incluyen:

• Dolor: sentimiento de dolor agudo y repentino en la Rodilla, especialmente al realizar movimientos bruscos o al agacharse
• Sensación de inestabilidad: la rodilla se siente "floja" o como si se fuera a salir de lugar
• Hinchazón: inflamación alrededor de la rodilla
• Bloqueo: sensación de que la rodilla se "bloquea" o "cede"

Pruebas médicas para diagnosticar

Para diagnosticar la Inestabilidad de la Rótula, el médico realizará un examen físico completo de la rodilla y puede solicitar pruebas complementarias como:

• Radiografías: para evaluar la alineación de la rótula y detectar cualquier anomalía ósea.
• Resonancia Magnética (RMN): proporciona imágenes detalladas de los tejidos blandos de la rodilla, como los ligamentos y el cartílago, para identificar lesiones
• Tomografía Computarizada (TC): puede ser útil en algunos casos para evaluar la estructura ósea de la rodilla con mayor detalle

¿Cuáles son las causas?

Las causas de la Inestabilidad de la Rótula pueden ser múltiples y variar de persona a persona, pero algunas de las más comunes incluyen:

• Anomalías anatómicas: Rótula Alta, surco troclear poco profundo, desalineación de la rodilla
• Debilidad muscular: debilidad de los músculos cuádriceps, especialmente del vasto medial oblicuo
• Traumatismos: lesiones directas en la rodilla o movimientos repetitivos que sobrecargan la articulación
• Hiperlaxitud Articular: mayor flexibilidad de las articulaciones, que predispone a la Luxación

¿Se puede prevenir?

Aunque no siempre es posible prevenir la Inestabilidad de la Rótula, algunas medidas pueden ayudar a reducir el riesgo, como:

• Fortalecer los músculos cuádriceps: realizar ejercicios específicos para fortalecer estos músculos puede ayudar a estabilizar la rótula
• Evitar movimientos bruscos y repetitivos: reducir la carga sobre la rodilla puede ayudar a prevenir lesiones
• Utilizar soportes o férulas: en algunos casos, el uso de estos dispositivos puede ayudar a mantener la Rótula en su lugar

Tratamientos

El tratamiento de la Inestabilidad de la Rótula dependerá de la gravedad de la condición y puede incluir:

• Tratamiento conservador: Fisioterapia, medicamentos antiinflamatorios, uso de férulas y modificación de las actividades.
• Tratamiento quirúrgico: en casos más graves, puede ser necesaria una cirugía para realinear la rótula, reparar los ligamentos dañados o corregir las anomalías óseas.

¿Qué especialista lo trata?

El especialista que trata la Inestabilidad de la Rótula es el Traumatólogo o Ortopedista.